Día de presentaciones


Entré a la biblioteca y cerré la puerta detrás mío. lo primero que pude notar es la iluminación tan tenue en comparación con la del exterior, que al parecer entraba unicamente por un gran tragaluz hexagonal en el centro del techo.

Un gran escritorio se extendía en un semi circulo frente a la puerta, a forma de recepción. Detrás de éste una pequeña anciana me miraba sorprendida mientras yo apreciaba la magnitud de los pilares y estanterías que cubrían las paredes de la biblioteca. 

El suelo estaba cubierto completamente de una suave alfombra marrón que parecía amortiguar el sonido de cada paso que daba.

-Hola pequeñin, acercate ¿Qué necesitas?-

-Hola, me gustaría leer algunos libros-

-Ohoh. Permíteme acompañarte entonces, nadie conoce la biblioteca mejor que yo. ¿Como te llamas?-

-Jin- 

-Hmm interesante nombre, El mío es Anna, soy la bibliotecaria asi que puedes contar conmigo aqui siempre que necesites. Bien… ¿Qué libros estabas buscando?-

-Me gustaría leer sobre las cosas comunes de este lugar, ya que recien llego y no conozco nada- 

-Hmm. Para aprender sobre nuestras costumbres populares creo que lo mejor será que empieces leyendo algunos libros de cuentos infantiles-

Anna levantó una pequeña trampilla en el escritorio y salió por el pasillo que se había formado. Me hizo un gesto para que la siga y comenzamos a bajar la escalera, nos metimos en un pasillo de estanterías. Mientras caminábamos la señora cargo una pequeña escalera plegable de pocos escalones y la llevó con nosotros unos metros más. Cuando parece que habíamos llegado a la estantería correcta, desdobló la escalera y subió dos escalones para alcanzar algunos libros que estaban en la altura. 

En concreto 3 pequeños libros poco anchos con una funda de cuero. Cada uno de los libros tenía pegada una pequeña etiqueta en la tapa.

“El pueblo acorazado” “La espada, el escudo y la pluma” “Los ojos de mil colores” Eran los libros que había elegido Anna para mí.

-Puedes empezar con estos que son faciles de leer y luego profundizar un poco mas en la historia si quieres, puedes usar cualquier mesa del centro, aunque como estas solo… ¿Qué te parece si lees en mi escritorio?-

-Si, está bien-

Y asi volvimos a subir las escaleras y nos sentamos. Al parecer Anna estaría organizando algunos documentos mientras yo me sentaba a su lado a leer.

Comencé por “El pueblo acorazado” Página tras pagina pude entender que se trataba de un cuento infantil que cuenta cómo la familia Braulis pudo fundar con éxito el reino.

-Es raro que los niños de tu edad se interesen tanto por los libros, además tu lees muy rápido- Dijo Anna luego de verme pasar algunas páginas

-Siempre leía con mi madre cuando estábamos en casa-

Continué leyendo el libro hasta terminarlo. En síntesis hace muchos años un grupo de cazadores muy capaces se asentó y protegió durante años a un pequeño pueblo que vivía siendo acosado por el ataque de criaturas mágicas y animales salvajes, gracias a esto pudo expandirse y progresar enormemente, por ésto mismo los nombraron reyes y fundaron un territorio donde los cazadores como ellos sean bienvenidos

El siguiente libro sería “La espada, el escudo y la pluma”. En la primera página de portada había un bonito dibujo hecho a mano que parece graficar el titulo, en un escudo de caballería estaban grabados la forma de una espada bastarda y una pomposa pluma de ave cruzadas en el centro.

Al parecer contaba el origen de la escuela de magia, aunque muy distinta a como es en la actualidad. Puesto que al principio solo podían estudiar aquellos nobles de alto estatus, ya que quienes impartían las clases eran aventureros famosos a quienes pagaban para ser tutores de sus hijos. 

Como resultado de la desigualdad en la formación de sus hijos y hartos de las peleas que esto causaba en las asamblea políticas, la familia Real decretó la construcción de una escuela que reuniera a los mejores tutores del reino y sus alrededores, todos los niños que puedan pasar el examen de ingreso recibirían una educación de alta calidad y en base a sus méritos podrían incluso tener el privilegio de formar parte de la guardia real. 

Ya que el propósito original era formar a los niños de la nobleza, el edificio escolar se construyó muy cercano al Palacio. Seguramente no creyeran que algún día incluso los plebeyos podrían institucionalizarse en la academia. 

El tercer libro “La mirada de los mil colores” fue sin embargo el mas interesante. Desde un principio era el mas delgado de los tres y tenía un aspecto mucho mas antiguo. Y todo su contenido se leia en coplas. Al parecer eran una recopilación de leyendas populares sobre un personaje en concreto: “El espíritu de los mil colores”. Hace muchos años, según cuenta la historia, el reino tuvo un periodo donde la delincuencia y el tráfico de personas estaba muy presente, y el rey de turno hacía caso omiso a los pedidos de justicia de su pueblo

Durante una aparición pública, su carruaje fue asaltado por un grupo criminal y su hija nacida hace pocos meses fue secuestrada de las manos de su madre. 

Éste dolido rey se dió cuenta ahora de que había cosechado el fruto de sus propias omisiones y responsabilidades como rey. 

Ya en su habitación en el palacio. El rey lloró con todas sus fuerzas, lloró y lloró sin parar durante toda la noche por la perdida de su hija, rogó a los espiritus y se culpó de todo, maldiciendose una y otra vez hasta el amanecer. 

Cuando el sol se asomó por su ventana, el rey pudo ver una figura semi transparente parada frente a ella. 

-Ya es suficiente humillación para ti-

Completamente tapada con una capucha blanca celeste, lo único que se podía distinguir era el brillo luminoso de sus ojos y la claridad de su voz, como si estuviera hablando directamente sobre sus oídos.

Sus ojos cambiaban gradualmente de color mientras hablaba, esa era la única pista sobre su identidad.

-¿Quien eres?¿Cómo entraste aqui?- Dijo el enojado rey secándose las lágrimas que inundaban su rostro hasta el momento

-No tengo intenciones de darte explicaciones ni me interesa perder el tiempo contigo, vine a proponerte un juego-

-¿Un juego?¿Crees que soy alguien con quien se pueda jugar?-

-Deberás buscar a tu hija en la inmensidad de la red criminal que dejaste asentarse bajo tus propias narices. Pero ¡Hey! no te preocupes, yo garantizaré su seguridad en donde quiera que esté. Sin embargo qué tan rápido la volverás a ver dependerá de tus esfuerzos- 

-Esa presencia… ¿Eres un espíritu verdad? ¡Hagamos un contrato! ¡Por favor! ¡Te daré cualquier cosa a cambio de que traigas a mi hija en este momento!-

-Alto ahi, si quisiera un contrato con alguien tan idiota y miserable como tú, buscaría a cualquier rata de la parte baja de la ciudad, ésto es simplemente un juego para mi propia diversion- 

Y con esas palabras, se esfumó en el aire y desapareció de la habitación sin dejar rastro

Ese mismo día, el rey encabezó una persecución donde se desplegaron todos los soldados del reino para investigar todos y cada uno de los suburbios donde se rumoreaba que los criminales instalaron su base de operaciones. Las siguientes semanas fueron reveladoras. Mas de una docena de organizaciones ilícitas y cientos de detenidos, incluso algunos nobles fueron delatados por los cabecillas. Guardias de la ciudad y funcionarios públicos fueron interrogados y culpados por corrupción. Algunas de las víctimas rescatadas fueron acogidas por el palacio y otras decidieron reinsertarse en la sociedad.

Se colgaron carteles de recompensa y pedidos de búsqueda de paradero. Y aun asi, no había surgido ni un rastro de aquellos que habían secuestrado a su niña.

Las opciones se habían acabado hace tiempo, la ciudad era mas segura que nunca y los reyes se acostumbraban cada vez mas a la ausencia de su hija.

Una estación completa había pasado. Los días a medida que se acercaba el frío invierno se hacian mas cortos y las noches mas largas, la humedad exterior empañaba las ventanas de la habitación. Y aunque las puertas deberían estar cerradas, una ligera brisa pareció arremolinar la habitación. 

-Bien- *Aplausos* -despierten ahora mismo-

La extraña figura, como si fuera un deja vú, volvió a aparecer en la misma posición que la última vez.

-¿Qué pasa cariñ…? ¡Aahhhhh! ¿Quien eres?¡GUARDIAAS!- Gritó la reina asustada

-No te molestes querida, las puertas estan bloqueadas y ningún sonido saldrá de esta habitación. Mejor guarda silencio- Dijo la figura misteriosa

-¡Eres tu otra vez! ¿Qué mas quieres? ¡Ya elimine toda la delincuencia de la ciudad, puse guardias a patrullar las calles e incluso me deshice de los funcionarios que hacian negocios con las bandas!… ¡Y aún asi! *Snif* *Snif* No encontré a mi hija…- Dijo el rey, saliendo de la cama y echándose a llorar de rodillas

-Cielos, si eras capaz de hacer todo eso desde un principio, ¿Por qué no lo hiciste?-

La extraña figura abrió su capa por el frente y dejó ver un abultado saco de tela, por el medio podía verse una pequeña cabeza sobresaliendo de éste. Un pequeño bebe dormía en sus brazos.

-Ésta vez has ganado, espero que entiendas lo que sucederá si tu reino vuelve a caer en la miseria- La extraña figura de los ojos coloridos se acercó al Rey y le entregó a su hija. 

-Adios, espero no volver a verte nunca mas- 

-Lo mismo digo, muchas gracias- 

El reino ahora estaba tan limpio de delincuencia como un mármol recién pulido y a partir de ahora, ninguno de sus sucesores olvidaría el terror de aquel rey ante aquella “mirada de mil colores”

-Señora Anna, ¿Esta historia fue escrita por la familia real?-

-Oh no, es solo un rumor que se corrió durante aquella época y que aún ahora algunos ancianos recuerdan como un cuento infantil, ese libro como tal es además bastante posterior a los hechos-

Cerré el libro mientras pensaba en la moraleja que dejaba el relato. Aun asi… ¿Qué haría mi madre si me secuestraran a mi? Creo que tambien sacudiría el reino desde sus cimientos, aunque literalmente…

-¿El reino sigue siendo tan seguro como cuenta la historia?- Dije mientras apilaba los libros en una torre

-Gracias a que se fundó la academia de magia, a lo largo de los años la ciudad se adaptó a recibir a personas como aventureros fuertes o jóvenes nobles de otros reinos. La familia Real no puede permitirse perder ese prestigio a causa de la inseguridad-

-La familia real parece ser bastante eficiente-

-No solo la familia real chico… la mitad de las personas en esta ciudad son estudiantes o aventureros. Si dejaran de venir porque no son bien recibidos, no quedaría nadie con quien comerciar y la ciudad se derrumbaría en poco tiempo-

-Todos se cuidan entre todos…-

-Asi es-

*CAMPANAZO*

-Creo que estas llegando tarde a comer-

-¿Eh? ¡Ah! Adios, muchas gracias-

Dejé los libros que había terminado de leer sobre la bandeja de “organizar” y salí corriendo hacia el comedor

Riel me dijo hoy mismo que debería estar en el comedor cuando toque la campana y ya estaba llegando tarde. Dejé caer mis alas en forma de bufanda hacia atrás y les otorgué mana progresivamente, lo suficiente como para generar impulso y acelerar mi carrera.

Justo en la puerta del comedor me crucé con Lisa y Tifa, detrás de ellas venía Riel siguiendolas de cerca. Acababan de llegar

-Jin, aunque tengas asuntos urgentes no es de buenos modales correr dentro del castillo, ven, vamos al comedor-

-Lo siento-

Comencé a caminar junto a Riel y detrás de las muchachas.

Nos acercamos a la mesa y los chicos se sentaron en sus respectivos lugares. Las sillas tenían respaldos tan altos que no se podía ver quien estaba sentado desde atrás. 

La mesa era larga y los adultos ya estaban sentados esperando nuestra llegada, incluida mi madre. Al parecer de vez en cuando pasan la tarde hablando mientras esperan a la hora de la cena. Un poco alejadas de la mesa estaban paradas las criadas, entre ellas Zahi.

En la punta de la mesa estaba sentado el rey con su esposa a su derecha y una silla vacía a su izquierda en la cual se terminó sentando Lisa. A un lado de ella se encontraba sentada mi madre y un asiento vacío en el que Zahi me indicó sentarme. Frente a mi se sentó un señor alto y con un color de pelo similar al de Tifa, a su lado estaba sentado Riel.

-Mucho gusto, ¿Jin, verdad? Es un placer conocerte, soy Jean Mediae, el padre de Tifa y Ministro Real. Tu madre me contó bastante sobre ti-

-Hola- Incliné mi cabeza y sonreí inocentemente al señor frente a mi. -Si! Mi nombre es Jin. Mucho gusto- Comencé a cargar maná en mi bufanda/alas 

Un golpe de mi madre aterrizó en mi cabeza a una velocidad tremenda, todo el comedor retumbó y un pequeño hilillo de humo se elevó por un momento de mi cabello

-Jin… Cuida tus modales en la mesa- A juzgar por su expresión pálida de asombro, solo Riel pudo darse cuenta del mana que estaba acumulando en mis alas. Los demas que estaban en el comedor simplemente miraron a su alrededor

-Que extraño oír truenos en esta época- Dijo Jean

-Ahahah asi es… Que extraño… Bien, comencemos a comer- Dijo el rey. Creo que él tambien se dió cuenta. 

Las encargadas de traer la comida fueron trayendo de a una las bandejas con comida y la sirvieron en nuestro plato. 

No estoy acostumbrado a comer, asi que naturalmente me sorprendí cuando destaparon una bandeja frente a mí. La cena consistía en una pata de ave cocida acompañada de un puré de color anaranjado y una pequeña cantidad de ensalada de hojas verdes y hierbas aromáticas. aunque la presentación era impecable, no soy capaz de sentir apetito de ninguna forma. Aunque lo que mas me preocupaba era la cantidad de utensilios que había a los lados del plato, por lo que miré a mi madre preocupado.

Mi madre cerró los ojos y suspiró al verme -Disculpa Zahi, Jin no está acostumbrado a usar cubiertos aún ¿Es posible que puedas cortar su comida en trozos mas faciles de comer?-

-¿Eh? Cl… Claro que si, con su permiso- Zahi se acercó a tomar mis cubiertos y hábilmente retiró los pequeños huesos y cartílagos y cortó la carne en pequeños trozos, los cuales terminó mezclando junto con el puré y la ensalada. En mi plato quedó una gran montaña de todos los ingredientes mezclados. 

-Ya puedes empezar a comer. Mis disculpas, lo tendremos en cuenta a partir de mañana-

-No te preocupes. Muchas gracias- Dijo mi madre, mirándome fijamente

-Gracias Zahi- Dije, entendiendo el mensaje de mi madre

Y así comenzó la cena.

-¿Como fue su primer día en la academia? Dijo el rey-

-Maravilloso, la academia progresó increíblemente desde la última vez que estuve en el reino- 

-Disculpe que la interrumpa señorita Tinia… Si no recuerdo mal, hoy dijo que recibieron el registro oficial del reino por primera vez…-

-Oh, disculpa por no comentarlo de antemano, Jean. La señora Tinia pertenece a una raza longeva, la última vez que estuvo aqui seguramente ni siquiera existía el registro de ciudadanos, puede parecer joven pero solamente es su apariencia natural. Sin ofenderla, Señorita- 

-Oh! Disculpe mi descortesía, señora-

-Oh no, no, no! Por favor no me llames señora. No hay ningún problema en usar solo mi nombre- Dijo mi madre sacudiendo sus manos frente a ella

-Entendido, Tinia… Mmmm ¿Como estuvieron las clases, Jin?-

-¿Eh? Bien, solo tuvimos una clase de combate práctico pero fue divertido-

-Divertido…-  Dijo Jean, pareciendo algo decepcionado

-El y su madre son absurdamente fuertes…- Dijo Riel, sin interrumpir su comida.

-Que sorpresa. Lo entendería de su madre que fue elegida por el señor Galas para ser instructora de combate, pero…-

-Si, su ataque fue impresionante. Incluso la maestra tuvo que ampliar su barrera-

-Terminó recibiendo un baldazo de agua igual que todos aqui. JAJAJAJA! La clase fue muy divertida. Gracias, maestra- Tifa se unió a la conversación

-Tifa, no seas grosera- Dijo su padre cruzando los brazos y cerrando los ojos

-No pasa nada, la clase de mañana tambien será algo especial- 

-Que miedo que usted diga eso…- Dijo Riel

-Tranquilo, no mojaré a nadie esta vez… Hahaha-

La comida terminó tranquilamente, retiraron las bandejas y platos en la mesa y trajeron pequeños tazones con frutas de diversos colores. Cada uno en la mesa elegía qué quería comer. Zahi se adelantó y tomó una de las frutas del tazón y comenzó a pelarla con un cuchillo. Luego la cortó en gajos, le quitó las semillas del interior y la dejó en un plato frente a mi. 

-Espero le guste, son Solaras plantadas en el jardín del palacio- 

-Mmmm, gracias-

Pinché uno de los gajos con un tenedor y lo metí completo en mi boca. Comencé a masticarlo, la pulpa era suave y casi tan dulce como la miel silvestre de los panales que encontrábamos casualmente en el bosque con mi madre, pero tenía un toque ácido que dejaba una sensación extraña en la boca. Disfruté cada gajo como si fuera el primero y en un par de minutos terminé con todos los que Zahi me había preparado. 

-Deberías probar las bayas de Illum. En esta época son abundantes y deliciosas, tambien puedes comerlas con la mano, no tienen semillas- Dijo el rey, pasandome una 

-¡Si!- Respondí, quería seguir probando frutas deliciosas

-Son esas pequeñas bolitas oscuras, las que parecen mas moradas son mas jóvenes y su textura es mas firme, tambien son un poco mas ácidas, mientras que las de tonalidad mas azul son las mas maduras, que son mas suaves y dulces, en esta época tambien es común usarlas para hacer licores-

-Probaré ambas- Una a una tome los dos colores y me tomé el tiempo para saborearlos y diferenciar su sensación

-¿Y bien? ¿Cual te gustó mas? Entre los niños de tu edad el sabor que elijas es un tema bastante serio- 

-Mmmm es difícil decirlo, el sabor ácido del mas azul es delicioso. Pero el mas maduro me agradó mas…- 

-¿VEN? ¡Les dije que no podía ser la única!- Lisa se puso de pie y golpeó la mesa con las manos

Todos nos quedamos congelados viendola fijamente. 

-Lo siento… Olviden eso- Lisa volvió a sentarse en silencio como si nada hubiera pasado

Unos segundos de silencio mas tarde… -Hmph, típico de artilleros…- Dijo Tifa, en tono de provocación

-¿¡Qué dijiste!? Lisa volvió a levantarse de golpe, haciendo un puño con una mano y apuntando a Tifa con la otra

-Esto de las bayas Illum es algo bastante severo…- Comentó mi madre

-Lo cierto es que la mayoría de vanguardistas prefieren las bayas mas ácidas, es un chiste bastante recurrente en ésta época del año- aclaró Riel

En este mundo, en  los combates de grupo, las personas se dividen en “vanguardistas” quienes van al frente con espadas o escudos. Y artilleros; Quienes estan especializados en formas de ataque a distancia. Opcionalmente tambien hay grupos que cuentan con un mago de soporte o algún arquero. Los aventureros solitarios son muy escasos.

-Ustedes solo tienen que pararse detrás de la vanguardia y preocuparse por apuntar bien- Dijo Tifa, mirando hacia otro lado

-¿Aún hay peleas por esas cosas entre magos y vanguardistas?- Dijo mi madre, al parecer recordó algo

-Pocas familias aún siguen manteniendo esas viejas costumbres, pero que Lisa y Tifa sigan bromeando asi entre ellas no hace otra cosa que validarlo y difundir ese estigma entre los demas alumnos- 

-Lisa, Tifa, entiendo que son amigas desde que nacieron, pero deben cuidar sus comentarios frente al resto de alumnos, recuerden que dentro de varios años, algunos de ellos heredarán el dominio de su familia y tendrán que tratar con ellos de forma oficial-

-Mis disculpas señor. Como aspirante a su guardian, es mi responsabilidad- Dijo Riel, poniéndose de pie y agachando la cabeza 

-No te preocupes, Jean y yo sabemos que son unas niñas difíciles de tratar, pero confiamos en tí-  Dijo el rey, intentando calmar a Riel

-¿Escucharon? Sus bromas traerán problemas a Riel eventualmente- Agregó Jean

-Lo sentimos…- Dijeron Lisa y Tifa simultaneamente

-Hace tiempo que la mesa no había sido tan animada… Si terminaron de comer, son libres de irse, chicos-

-Bien, con su permiso- Los 4 nos levantamos y los adultos se quedaron charlando

-¿Quieren ir a mi habitación a jugar?- propuso Lisa

-Mañana tenemos clase otra vez con la señorita Tinia, preferiría descansar-

-Vaaaamos, solo estaremos un rato. Tu tambien vienes, ¿No, Jin?-

-Esta bien-

-Bueno, iré solamente para acompañar a Jin-

Caminé con Riel detrás de Lisa y Tifa, venían hablando bastante animadas. De repente Tifa frenó de golpe y Riel casi se choca con ella.

-¿Qué paso ahora?-

-Iré a pedir que nos lleven bocadillos y bebida a la habitación de Lisa, adelantense- Luego de decir esto, Tifa empezó a correr y nos dejó solos con Lisa

-¡Tifa! ¡No corras!- Gritó Riel -Bien, vamos a esperarla en la habitación-

Subimos la escalera y llegamos a la habitación de Lisa, la puerta tenía grabada una pequeña tiara en su madera. Hubiera esperado que la princesa del reino durmiera en una habitación enorme llena de lujos, pero me sorprendí cuando Lisa abrió la puerta y vi que era apenas un poco mas grande que la mía, y no tenía mayores lujos a excepción de una habitación separada para la cama y un guardarropas. 

-Con su permiso…- Dijo Riel, dejando su abrigo en un pequeño gancho de madera que había junto a la puerta. Hice lo mismo y seguí a Riel hacia una pequeña mesa junto a la ventana de la habitación. 

-Pónganse cómodos, iré a cambiarme- Lisa entró al vestidor y cerró la puerta

Riel y yo nos sentamos en la mesa y comenzamos a charlar

-¿Como crees que será el entrenamiento mañana?- Preguntó Riel

-No lo se, hoy simplemente quiso jugar con nosotros, mañana podría ser cualquier cosa-

Lisa salió del vestidor con un vestido simple y el pelo recogido -Listo, solo queda esperar a Tifa- 

Justo en ese momento sonó un golpe en la puerta

-¡Chiiicoos! Llegué con los bocadillos- Gritó Tifa desde afuera

-Pasa- Dijo Lisa suavemente

-Hay gente en el palacio que ya está durmiendo. No deberías gritar- reclamó Lisa

-Ups- Dijo Tifa, encogiéndose de hombros -Nos acabamos de levantar de la mesa del comedor ¿por qué no comemos ésto en el piso?-

-Tiene algo de razón- Dijo Riel, levantandose y acercando una alfombra que había en el otro lado de la habitación. Tomó la bandeja que tenia Tifa en las manos y la colocó en el centro

Nos sentamos en ronda alrededor de la comida y cada uno tomó un pequeño panecillo de la bandeja.

-Oye Jin, no creas que olvidé lo que dijiste hoy. Muestrame tus alas- Lifa se arrastró hasta quedar detrás mío, sacudiendome por los hombros

-Lo había olvidado. Dijiste que formaste un contrato con un espíritu. Eso es impresionante ¿Puedo verlas yo tambien?- Dijo Lisa, inclinando la cabeza

-Oigan, no sean molestas…- Dijo Riel, levantando la voz

-Esta bien, confío en ustedes-

Deshice mi bufanda y mis alas cayeron hacia atrás, volviendo a su forma similar a hojas de papel. 

había pasado todo el día con las alas enroscadas como parte de mi ropa, asi que levanté mis brazos y estiré mi espalda junto con mis alas.

-¡Aaaah! Que bonitas- Lisa corrió detrás mío y tomó una de mis alas y comenzó a acariciarla

-¡Hegh!- Me ericé de golpe -Ahahahaha, eso hace cosquillas ¡Lisaa, paraa!-

Comencé a sacudirlas para escapar de las manos de Lisa

-No sabía que un espíritu podría usar sus alas como parte de valor en un contrato- Dijo Riel, llevándose la mano a la barbilla

-Tambien parecen bastante resistentes a pesar de ser tan finas- dijo Tifa, quien tomó una de mis alas con cuidado sin hacerme cosquillas

-Jin, ¿Puedes usarlas para volar?- Preguntó Lisa con los ojos brillosos

-Claro que si, son… alas…-

-Existe la magia de vuelo, pero gasta tanto mana como peso se lleve. Incluso asi se requiere tanto entrenamiento que solo un par de familias dedican su tiempo a usarla de forma práctica, suelen ser los mensajeros oficiales del palacio- Dijo Lisa

-¿Realmente es asi de escasa? Mi madre dijo que para los aventureros la magia de vuelo es algo relativamente común desde la Clase A en adelante-  Dije 

 -Ni siquiera tú comprendes lo que estás diciendo- Dijo Riel, palmeando su cara -Los aventureros de clase A son increíblemente fuertes y talentosos, incluso un reino pequeño tendría que pensar varias veces antes de enemistarse con un aventurero así. En el peor de los casos podría ser contratado por un reino enemigo y entrar en guerra- Explicó Riel

-La clase A es la que está en el medio ¿son tan poderosos?- 

-En esta ciudad academia, hay 3 personas que fueron aventureros de clase A. Hoy los conociste, Jin- Dijo Riel

-¿Tu padre y esas dos personas?- Consulté

-Asi es. Mi padre actualmente es el comandante de la guardia Real, el anciano fue el famoso artillero Dictis, ahora es director de la corte de magos del reino. Y ella es Leila, aunque está retirada, a veces instruye al cuerpo blanco del ejercito del reino- Dijo Riel

-ellos siguen siendo los únicos aventureros que alcanzaron la clase A en los últimos años de la ciudad- Dijo Tifa -Incluso en rango B, no hay ni siquiera 10 personas. Recién a partir de la clase C la cosa cambia, siendo 40  aventureros registrados entre el C y D, son alrededor de mil aventureros entre el E y F-

-¿Galas es un aventurero tambien?- 

-Tu madre y el son amigos, me sorprende que no lo sepas. El es el único rango S que tuvo este reino- Dijo Lisa

-¿Galas es de rango S? No parece demasiado fuerte- Dije

-Se gano el rango S tras salvar al reino de una estampida de monstruos a gran escala. Con un solo hechizo, puede parecer que no, pero tiene un control extraordinario sobre su mana. Ahora trabaja como director en la academia de magia- Comentó Tifa

-Creo que estas tan acostumbrado a la fuerza de tu madre que no comprendes lo fuera de escala que está- Dijo Lisa -¿Ella no es aventurera?-

-Ella no es aventurera- Dije -Siempre vivimos alejados de las sociedades grandes. Y nunca necesitamos dinero para vivir- 

-No solo se es aventurero por el dinero, tambien tiene beneficios con el gremio, anunciar pedidos, adquirir mapas de zonas e informes de monstruos. Incluso los nobles como nosotros necesitaremos alguno de sus servicios tarde o temprano- 

-Podríamos ir mañana a registrarte luego de clases- Dijo Riel -Bien, ya tenemos planes para mañana. Vamos a dormir por hoy- 

-Tifa hoy dormirá conmigo- Dijo Lisa

-Bien, nos vamos entonces. Buenas noches- Dijo Riel

-Buenas noches- Dije yo

Riel tomó su abrigo y salimos al pasillo, bajamos la escalera y llegamos al piso de nuestras habitaciones. 

-Tu asistente te despertará temprano, seguramente el señor Galas habrá conseguido todo lo que necesitas para el dia de mañana. Buenas Noches- Explicó antes de darse vuelta e ir hacia su habitación

-Muchas gracias- Incliné mi cabeza a Riel

Pasé por la habitación de mi madre y golpee la puerta. -Pasa Jin-

-¿Cómo te fue hoy con tus compañeros?- Dijo mientras se levantaba de su escritorio y caminaba hacia mi

Desató mi bufanda y deja que mis alas caigan hacia atrás. Se agachó y me levanto por las axilas. Flotamos hasta la cama y mi madre se apoyó en la cabecera. Yo quedé entre sus piernas acostado sobre ella simplemente mirando hacia la pared.

-¿No me extrañaste hoy?- Dijo mientras me acariciaba el pelo

-Si… La sociedad humana es muy complicada- Dije, apoyando la nuca en el pecho de mi madre y levantando mis manos hacia el techo

-Si, si, lo se ¿Quieres que nos bañemos?-

-¿Nos bañaremos en una palangana?- Consulté

-El rey me dió permiso para hacer algunas reformas- Me cargó y llevó en la espalda hacia el baño. 

Mi madre en algún momento del día tuvo la increíble idea de arrastrar todos los muebles del baño a una pared alejada y levantar una bañera de piedra pulida en la esquina del baño

-¿Te gusta? No es tan grande como la de nuestra casa pero nos sirve por ahora- 

-Es mejor que la palangana…- Dije, derrotado

-Zahi me contó lo que pasó hoy, lamento que hayas tenido que pasar por eso…-

-No pasa nada, yo debería tener mas cuidado en realidad- Dije mientras encogía mis alas disimuladamente

Deshicimos nuestra ropa y nos sentamos dentro de la bañera. Mi madre comenzó a vertir agua caliente hasta que llegó a la altura de mi cabeza y comenzó a enjabonar mi pelo como de costumbre

-El cielo es algo inexplorado para los humanos, pocos tienen la posibilidad de ver algo por encima del nivel de la ventana mas alta a la que puedan acceder. Por eso es tan sorprendente para ellos-

-Mañana me llevarán al gremio de aventureros a registrarme luego de clases- Comenté

-¿Gremio de aventureros? Hehe, eso será gracioso. Creo que iré con ustedes-

-¿Eh? ¿Por qué?-

-Tal vez solo quiero estar un rato mas contigo. A todo esto, tu pelo ya casi llega a tu cuello de lo largo que está creciendo ¿Quieres cortarlo?-

-Cortalo, por favor- Aún estando de espaldas podría jurar que sentí como a mi madre se le dibujaba una sonrisa pícara en la cara. Se apresuró para terminar de lavar su cabello, enjuagó el mío y salimos del baño. Ella generó una camisa larga y yo una remera simple gris y un pantalón corto. 

Mi madre tomó una tijera de su escritorio y volvimos a sentarnos en su cama como antes, apoye mi cabeza sobre su pecho y ella comenzó a tomar mechones sueltos de mi pelo y recortarlos ligeramente. -¿Cuando fue la última vez que hicimos esto?- 

A medida que iba cortando, arrojaba los mechones al aire y los quemaba con magia, el sonido y la sensación de la tijera cortando mi pelo y la calidez de los dedos de mi madre acariciando suavemente mi cuero cabelludo lentamente hacían que mi vista se ponga pesada y mis ojos se cierren lentamente, hasta que finalmente me dormí.

-Así será hoy al parecer. Y yo que recién había terminado con tu pelo…- Dejó la tijera sobre la mesita que estaba al lado de la cama y pasó sus brazos sobre mis hombros, abrazándome desde atrás. -Supongo que mañana será otro día agitado. Descansa, Jin…- 

Y así pasó el primer día en la ciudad academia.

La mañana siguiente llegó, mi madre estaba terminando de arreglar su uniforme de instructora de la academia frente a la ventana que daba al patio interior del palacio, que aun con la cortina cerrada, llegaba a iluminar sutilmente la habitación. 

-Buenos días Jin ¿Como dormiste?- 

-Buenos días, excelente. ¿Qué es esa ropa?- 

-Me levanté temprano para ir a que Galas apruebe el uniforme que hice, al parecer los profesores pueden usar la ropa que consideren mientras pasen por la aprobación de él. Y ya que estaba lo convencí para que permita tambien tu bufanda- 

Estaba acomodando la falda de un vestido blanco grisáceo con mangas que dejaban ver los hombros, adornado con hexágonos celestes sobre su superficie, sobre éste una gran capa celeste con capucha que podría cubrir todo su cuerpo hasta sus rodillas, atado al cuello con un pomposo moño de hilo dorado y decorado por toda su extensión con el mismo patron de sus alas, en las piernas un par de medias negras que llegan hasta el vestido y terminan en un par de botas negras altas.

-¿Qué te parece?-

-Estas radiante, seguro que llames la atención-

-Incluso puedo ocultar mis alas tranquilamente bajo esta capa- 

-Si, me gusta mucho ¿Quien lo hizo?-

-Galas sabe dibujar sorprendentemente bien, sin su ayuda podría haber tardado varios días en conseguir algo parecido. Zahi vendrá a buscarte en cualquier momento asi que puedes ir preparándote, Galas dijo que ya había preparado tus materiales asi que seguramente los traiga-

-Bien, ya me levanto- Dije mientras bajaba de la cama

Deshice mi ropa de dormir mientras usaba mana para generar el uniforme por encima, mi madre me ayudó a atar mis alas y acomodó mi pelo. Justo a tiempo, Zahi tocó la puerta y mi madre la hizo entrar, llegó cargando una pequeña caja de madera que indicaba el remitente y el destinatario, debajo una etiqueta roja que decía “URGENTE”. 

-Menos mal… No encontré a Jin en su cuarto y no sabía donde buscarlo si no estaba aqui. El señor Galas envió un paquete para ustedes- 

Zahi pasó y dejo la caja sobre la mesa, mi madre se acercó y quitó la tapa de arriba. Sobre la pila de cosas había un pequeño trozo de papel escrito. 

“Aqui hay un conjunto completo del uniforme original para ambos por si acaso, tambien hay un par de cuadernos y útiles para Jin junto con un pequeño bolsillo mágico que todos los estudiantes tienen. Además te dejo un libro sobre los sucesos de las últimas décadas, te vendrá bien”

-Si ya estan listos pueden esperar a los chicos en el comedor, deben estar terminando de prepararse en este momento. Yo ordenaré esa ropa-

-Yo me adelantaré a la academia ¿Podrás ir solo?- Dijo mi madre, volteando a verme

-Si, no hay problema- Metí los cuadernos y útiles en el bolsillo, que abroché a mi cinturón.

-Bien, hasta luego- Se agachó a abrazarme rápidamente y salió por la puerta-

-Bueno, Zahi, yo tambien me voy ahora-

-Nos vemos mas tarde, ten cuidado-

Empecé a caminar hacia el comedor y me crucé con Riel en el pasillo, con su espada colgada de la cintura y el uniforme impecable de la academia. Nos saludamos y seguimos caminando hacia el comedor, tomamos una pequeña mesa cuadrada junto a una ventana y nos sentamos

-Ahora habrá que esperar a esas dos, al contrario que Tifa, a Lisa le cuesta especialmente levantarse-

-No tenemos apuro… ¿O si?-

-Mientras lleguemos a tiempo a las clases, no-

Una criada se acercó a nosotros y dejó cuatro pequeños paquetes envueltos en papel sobre la mesa -Aqui está su comida, que tengan un buen día- 

Cada paquete estaba marcado con el nombre de cada uno, Riel, Tifa, Lisa, Jin. Riel tomó el suyo y lo guardo en su bolsillo mágico, yo hice lo mismo. 

-Si no llegan para cuando suene la campana, tendremos que ir a buscarlas y correr para no llegar tarde- 

No iba a ser necesario, ya que en el mismo momento que sonó la campana, las dos chicas entraron por la puerta del comedor.

Riel y yo nos pusimos de pie para saludar. 

-Buenos días- Dijimos al mismo tiempo, Riel sin embargo agachó la cabeza

Tifa tenía una gran sonrisa e irradiaba energía, por el contrario Lisa tenía los ojos entrecerrados y los hombros caídos. A esto se refería Riel.

-Vamonos, o llegaremos tarde, dijo Tifa antes de empezar a correr-

-Tifa, no corras. No llegaremos tarde aunque caminemos, además Lisa…-

-No voy a correr aunque estemos llegando tarde…-

Salimos del castillo y Lisa terminó de despertarse poco antes de llegar a la puerta de la academia. El guardia que había visto ayer pareció sorprendido de verme pero no dijo ni una palabra y nos permitió avanzar. 

Entramos al edificio de la academia y a medida que íbamos avanzando, el resto de los alumnos susurraban cosas detrás nuestro. Simplemente generé discretamente una pequeña partícula de nieve en la nuca de aquellos que decían cosas inapropiadas y pasé de largo, se callaban al instante y no era nada peligroso. Asi fue hasta que subimos las escaleras al primer piso y la gente pareció calmarse un poco

-¿A dónde vamos ahora?- Consulté al grupo

-Nuestra primer clase es de combate aplicado. Es en la sala de aquí a la derecha-

Entramos y tomamos asiento en un grupo de bancos del medio del salon. Tras unos minutos el salon se lleno de estudiantes que hablaban entre ellos. Riel y Lisa me ayudaron a organizar mis cuadernos.

-Se suelen dividir ambos cuadernos en “Práctico” para las anotaciones de las clases prácticas o magia, y “Aplicado” para las clases de Fundamentos y desarrollo de la magia, estrategias de combate y batalla-

-Exacto, tambien es posible simplemente comprar otro cuaderno-

-Bien, entonces… ¿Algo asi?-

-Si, esta perfecto-

Terminé de asignar las páginas a cada materia, mientras tanto Riel me ayudaba Tifa y Lisa estaban charlando casualmente al igual que el resto de alumnos.

Una pequeña señora mayor tapada con una túnica y un gorro puntiagudo entró a la habitación y lentamente todos los alumnos comenzaron a tomar asiento y guardar silencio.

-Buen día chicos, el director me comentó que hoy es la primera clase de uno de ustedes ¿Podrias ponerte de pie y presentarte?- 

-Claro- Dije y me puse de pie -Mi nombre es Jin, es un gusto compartir esta clase con ustedes- Poniendo una mano en mi pecho, agache ligeramente mi cabeza

-Pareces mas pequeño que el resto, dinos tu especialidad- 

-Según la clasificación de este lugar, creo que se me considera un mago artillero-

-¿Según este lugar? ¿Qué significa eso?-

-Profesora Elara, el no conoce nuestro sistema de clasificación- Lisa se puso de pie y respondió por mi

-No recuerdo haberte dado la palabra… Pero está bien. Hoy tendremos una clase especial de todas formas, cada uno mueva su banco a un lado y juntense frente al pizarrón-

Todos los alumnos comenzamos a mover los bancos haciendo lugar en el centro de salon. Todos excepto…

-Señorita Lisa, no es necesario que dañe sus finas manos con estas mesas, permítame hacerlo por usted. Mi nombre es…- Ni siquiera llegó a presentarse, era Edgar. El mismo que ayer fue humillado brutalmente por mi madre luego de faltarle el respeto

-No será necesario, puedo moverla por mi cuenta- Un pobre alumno fue fríamente rebotado frente a nosotros, Tifa y Riel se rieron de ella a escondidas y Lisa los miró molesta.

Nos sentamos en el suelo en un semi circulo al rededor del pizarrón, la maestra estaba al centro frente a él

-¿Todos escuchan? Bien, la nueva profesora ayer usó una técnica bastante curiosa ¿alguien recuerda cual era?-

-Usó una barrera mágica- Dijo una chica detrás nuestro. La maestra hizo un pequeño dibujo de una persona en el pizarrón

-Bien, hoy temprano la maestra Tinia me concedió un pequeño catalizador con una muestra de la barrera de su técnica en pequeña escala, la clase de hoy la usaremos para analizarla y encontrar una forma de contrarrestar a los usuarios de barrera-

La maestra saco un pequeño trozo de piedra con un dibujo calado en ella, cerró los ojos y usó un poco de mana para activar el artefacto. Un pequeño hexágono del tamaño de un plato pequeño apareció sobre él. 

-Incluso yo puedo mantenerlo activo por solo algunos minutos, tómense un momento con su grupo y piensen en una solución. Luego pueden pasar y probarlo por su propia cuenta- 

Un chico alejado de nosotros levantó la mano.

-Si gasta tanto maná en esa pequeña barrera ¿no sería mas facil simplemente continuar regulando los ataques hasta que el oponente se quede sin mana?- Dijo

-¿Confías en que tienes mas maná total que la profesora Tinia? Si es el caso, bien. Si no, el que terminará agotado antes eres tú-

-Me gustaría intentar algo. ¿Puedes ayudarme Riel? Dijo Lisa antes de susurrarle el plan al oído-

Lisa y Riel se pusieron de pie, Riel tomó el artefacto y lo apuntó hacia Lisa, que se había alejado un par de pasos, ambos usaron algo de mana y la barrera se activó. Lisa apuntó su mano a la barrera y generó una pequeña llama entre la piedra y la barrera en sí. Al parecer el experimento funcionó.

-Es una idea bastante factible, podrías generar una explosión dentro de la barrera de tu oponente. Bien pensado-

Todos los estudiantes abrieron sus cuadernos y anotaron rápidamente lo que acababan de ver. 

Otro chica levantó la mano -Se podría realizar un ataque rápido antes de que la barrera se despliegue-

-Bien, la magia de barrera es una técnica antigua muy complicada. Por el mismo motivo es bastante fuerte y pocas personas pueden dominarlo, eso tambien la hace lenta si el usuario no está muy interiorizado-

Y así, la hora pasó mientras cada alumno que quería experimentar pasaba al frente y probaba una estrategia diferente, la campana sonó y volvimos a acomodar los bancos antes de salir al recreo. Nuevamente fuimos al árbol del día anterior y Tifa volvió a sacar la manta en la que nos sentamos a comer.

Mi comida era un trozo de carne muy suave entre dos panes, mojado con una salsa picante que le daba un sabor interesante. Aunque mas de la mitad terminó comiendolo Tifa cuando le ofrecí una probada.

La campana volvió a sonar y nos reunimos nuevamente en el patio, mi madre se acercó caminando. Las chicas se amucharon a su alrededor para saber mas sobre su nuevo uniforme

-Profesora, se ve preciosa ¿Quien hizo ese hermoso vestido?-

-¿Eh? Galas lo hizo para mi- 

-¿¡El Señor Galas hizo un vestido especialmente para usted!? Tal privilegio…- Algunas chicas se ruborizaron completamente

-¿Privilegio? Creo que lo estan mal interpretando. Simplemente empecemos con la clase- Mi madre lucía completamente confundida

-Mientras ustedes estaban en la clase anterior, pedí la colaboración de algunos espiritus menores. Pueden salir, no tengan miedo, bonitos- 

Pequeñas lucecitas de muchos colores se escaparon de la capucha de mi madre y comenzaron a volar como diminutas luciérnagas en la noche sobre las cabezas de mis compañeros. 

-Les pedí que se dejen ver un momento, por ahora se están alimentando de mi mana hasta que interactúen con ustedes… ¿Eh? ¿Cómo que “poco”?- Las lucecitas se posaron sobre los hombros de mi madre y le susurraron al oído, mi madre abrió los ojos sorprendida y gritó a los alumnos -¿Gastaron todo su mana en la clase anterior?- 

-Maestra, el artefacto que le dió a la profesora Elara usaba mucho mana-

-Es una barrera antigua, debería ser obvio que necesita bastante para funcionar. ¿Cómo se les ocurre venir a una clase de combate mágico casi sin mana? Tifa ¿puedes ir corriendo a la oficina del director? Pídele algunas pociones de recuperación, dile que las pagará él mismo-

-Voy inmediatamente…- Tifa empezó a correr hacia el edificio

-El resto, hagan una ronda a mi alrededor y siéntense-

Como nos pidió, formamos un circulo alrededor de mi madre y nos sentamos en el suelo.

-Los espiritus están mas cerca de las personas de lo que parece. Los espiritus menores no tienen una forma física, por lo que suelen estar cerca de lugares donde haya mucho mana junto, como esta academia. Especialmente éstos que son muy débiles- Con un tono mas gentil que de costumbre, comenzó a explicar

-Ya deben saber que pueden pedir prestado el poder de los espíritus. Si ambas partes están de acuerdo, el espíritu puede consumir el maná de ustedes y amplificar la magia que deseen canalizar a través de él. ¿Puedes ayudarme un momento? ¿Eh? Está bien, solo uno- Mi madre se arrancó un pelo del flequillo y se lo ofreció a una de las lucecitas

Una pequeña llama de color rojo intenso pero del tamaño de una pequeña vela a punto de extinguirse se encendió sobre el pequeño espíritu y este comenzó a volar en circulos sobre las cabezas de todos los que estabamos sentados

-Gracias. Cada espíritu puede tener afinidades y gustos al igual que ustedes, y al igual que las personas, pueden no llegar a congeniar de inmediato-

-Maestra ¿las personas con afinidad hacia los espíritus no son bastante raras?-

-Los espíritus son curiosos y juguetones por naturaleza, las personas que solo los aprecian por su poder raramente captan su atención. Esa es la realidad-

-¡YA LLEGUE! ¿De qué me perdí?- Tifa llegó corriendo cargando una caja de madera llena de pequeños frascos y un pequeño papel que Tifa le entregó. Mi madre fríamente y sin decir una palabra tomó otro pelo y lo lanzó al aire. El papel se envolvió en llamas y las cenizas se dispersaron en la brisa

-Ese elfo insolente se atreve a enviarme la cuenta…-

-Ya lo arreglaré después. Gracias Tifa ¡Todos los que sientan que tienen menos de la mitad de su mana total tomen una botella! ¡Si es su primera vez tomando una poción de maná, tapen su nariz y tomen solamente medio frasco!-

Rápidamente, casi todos tomaron un botellín y bebieron, al parecer era la primera vez de Lisa y Tifa, quienes compartieron un frasco. Riel bebió una completa.

-Usen todo el campo, tienen toda la hora para jugar con ellos. Cualquier duda que tengan pueden acercarse a mí. Yo estaré aqui mismo-

Y así todos mis compañeros se dividieron en grupos siguiendo a alguno de los espíritus que se dispersaron por todo el campo. Mi madre se quedó junto a nuestro grupo que estaba acompañado por uno de los espíritus que brillaba de colores celestes

-Aunque no escuchen sus palabras o sonidos, tambien pueden entender sus sentimientos mutuamente si ella quisiera comunicarse con ustedes, son muy emocionales después de todo- Dijo mi madre

-Su brillo es muy bonito…- Dijo Lisa casi susurrando, el espíritu comenzó a dar vueltas a su alrededor y bañarla en brillitos celestes

-¡Muchas gracias! ¿Segura? Bien, puedes usar mi ropa- El espíritu se posó en el moño de hilo dorado del uniforme de Lisa y su luz desapareció

-Felicidades Lisa, hiciste un contrato con un espíritu luminoso- 

-Supongo que si. No pensé que sería tan sencillo- 

-Te aseguro que no lo es-

-Consumirá un poco de mi mana constantemente para fortalecerse y me prestará su poder cuando lo necesite, a cambio descansará en mi ropa-

-Muy bien, me parece bastante justo-

Una corriente de viento pasó a través de nuestro grupo y azotó a mi madre directamente de frente. Aunque solo movió su pelo ligeramente. Una pequeña lucecita voló agitadamente y susurró algo al oído de mi madre

Mi madre miró su falda -¿Eso es lo mas gracioso que se les pudo ocurrir?- Se cruzó de brazos -Ah.. Ya veo.. ¿Y qué ofrecieron? Jejeje, bien pensado, ahora iré a buscarlos. ¿Puedes quedarte con ellos?- Mi madre tomó 4 pociones de maná y las guardó en su bolsillo, dejó al pequeño espíritu sobre la cabeza de Tifa

-Lo siento ¿podrías decirme qué pasó?- Tifa tomó al espíritu con su mano y lo acercó a su oreja. 

De repente se asomó una sonrisa que terminó en una carcajada de Tifa -¿¡Es en serio!? ¡Ni siquiera pudieron verlo! AHAHAHAHA-

-Tifa ¿Qué dijo?-

-Esos idiotas querían que este pequeño espíritu levante la falda de las chicas con una rafaga de viento aunque se negó para no ofender a la maestra. Pero este bribón redobló la apuesta y pidió el maná de todo el grupo a cambio de intentar levantar la falda de la maestra. No solo no pudieron ver nada, sino que se desmayaron por usar mucho mana. ¿No es genial?-

-Que decepcionante…- Dijo Riel

-Seguramente ahora les estén haciendo tragar la poción con botella y todo, JAJAJA. Claro que me encantaría, pero siguiéndome todo el día no te divertirás mucho. Está bien si sigues aqui en la academia, te daré un poco de maná en los recreos a cambio de algo de información ocasionalmente-

-Tifa ¿tú tambien formaste un contrato?- Consultó Lisa

-No hicimos ningún contrato, pero creo que puedo confiar en él- El espíritu volvió a la cabeza de Tifa

Continuamos hablando casualmente, ya habíamos aprobado la clase de hoy y solo restaba esperar que suene la campana para irnos de la academia.

-¡La clase de hoy terminará pronto, juntense por favor para el cierre!- Formamos un semi circulo alrededor de mi madre. Al parecer el grupo de las ideas raras se había recuperado bien aunque aún estaban pálidos -Espero que hayan disfrutado la clase de hoy. Felicidades a los que pudieron interactuar con los espíritus y a los que no pudieron y realmente desean hacerlo, pueden buscarlos en los rincones de la academia por su cuenta y seguir intentándolo. Que tengan un buen día, son libres de descansar hasta que suene la campana. Ustedes tambien, son libres de hacer lo que quieran-

Algunos espíritus dejaron de rondar la clase y se alejaron hasta desaparecer de la vista, otros se acercaron a algunos de los chicos o continuaron dando vueltas cerca de mi madre.

La campana sonó finalmente y todos los alumnos de la academia comenzaron a dispersarse. Nosotros esperamos en el patio a que mi madre termine de “hablar” con Galas sobre la cuenta de las pociones y finalmente salimos del recinto de la academia en dirección al gremio de aventureros. 


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