Capítulo #5 – Un encuentro en el pueblo a medias

Me di una vuelta en la cama… otra vez.

— Esto no está funcionando — Pensé en voz alta mientras el sol comenzaba a aparecer por el horizonte.

Había despertado hace un rato por el ronquido Kurai y no había podido quedarme dormido desde entonces. Y la verdad, ya estoy cansado de solo estar acostado sin hacer nada.
Finalmente, decidí levantarme e ir a hacer algo, no es tan temprano como para que sea una molestia estar en pie.

Mientras me levantaba miré hacia las camas de los demás.

En el barco solo tenemos una habitación con literas y nunca ha sido una molestia, pero ahora con tantas personas, quizás debamos usar otra.

Krim estaba durmiendo con un brazo colgando de la cama mientras mantenía una pose de ataúd con el resto de su cuerpo… raro. Ikaros, como siempre, dormía envuelta en sus alas por lo que no podía ver ni siquiera su cara. Kurai seguía roncando mientras dormía desordenadamente con la ropa de cama por el piso y su pierna colgando. Tsu simplemente estaba envuelta y en un rincón, supongo que es la más normal del grupo?

Terminé de ponerme mis botas y caminé hacia la cubierta del barco, por el camino encontré las cenizas de las cartas que quemé anoche luego de perder demasiado… deben haber hecho trampa, estoy seguro!

Las limpié con una escoba y una pala, y luego puse el barco en curso. Al terminar, me senté en una silla en cubierta.

El mundo era tan amplio…

— También te despertó Kurai?— Dijo alguien detrás de mí.

Me di la vuelta y pude ver a Tsu ahí, se había cambiado y ahora usaba ropa de Ikaros así que le quedaba algo suelta, ellas tendrían una diferencia de unos 30 centímetros aproximadamente, no era solo que Ikaros era alta, sino que Tsu también era baja, por lo que si la ropa le quedara bien sería raro.

— Sí, ya no podía quedarme dormido — Le respondí.

— Haah… No entiendo cómo puede roncar tanto…—

Apunté a una silla a mi lado, mientras inclinaba la cabeza hacia un lado.

— Quieres sentarte?—

— Hmm… Okay —

Nos quedamos en silencio un rato mirando el paisaje, no era ese tipo de silencio incómodo donde quieres decir algo pero no puedes, sino que era aquel en el que no hay necesidad de decir nada.

No me molestaría quedarme así un rato, pero tenía que preguntarle algo.

— Oye… Tsu —

— Hm?— Ella miró en mi dirección.

— Puedes responder algo sinceramente?—

—…Supongo — Parecía algo preocupada por lo que le iba a preguntar.

 — Tú, cómo te sientes con este viaje? No los detuve porque quería que fuéramos todos, pero el modo en el que decidiste venir con nosotros no fue el mejor realmente —

— Ah, eso… Da igual, no tengo nada que hacer de vuelta en casa de todos modos —

— Nadie te espera?—

—…No, nadie —

— Hmm… Pero aun así, quieres venir?—

— Al inicio solo me dejé llevar por Krim, pero ahora… No es que nos conozcamos mucho pero al menos sé que son divertidos… Entre no hacer nada, seguir en la escuela y todo eso e ir en este viaje con ustedes… Por lo menos aquí me divertiré más —

— Ya veo… eso es bueno — No pude evitar sonreír luego de escucharla.

Ella se detuvo y me miró fijamente por unos segundos.

— Cuántos años dijiste que tenías?— Me preguntó.

— Catorce, por qué?—

— Catorce… Que mal —

— Hm?—

Luego de eso no dijo nada más y seguimos mirando el paisaje por un rato más.

Eventualmente nos dio hambre, así que me ofrecí a preparar algo mientras ella despertaba a los demás.


Mientras Vincent prepara algo simple, me pidió que fuera a despertar a los otros tres.

Es molesto, pero supongo que puedo hacerlo como agradecimiento por preocuparse. Por supuesto, si me hubiera dicho que cocinara sería otra historia.

Caminé sin apuro hasta la habitación.

Cómo se supone que los despierte?

Krim siento que despertará fácilmente, no me extrañaría que dijera algo como “Estaba despierto, así que ya es hora?” o algo intentando presumir del mismo estilo.

Siento que Kurai será más difícil. Parece tener el sueño pesado, quizás debería traer un poco de agua o algo.

Ikaros… Le pediré a alguien más que la despierte, no quiero que me golpee con sus alas si despierta muy repentinamente o algo.

Di un bostezo y abrí la puerta.

— Hm, como pensaba, ya es la hora —

Y Krim dijo la frase presumida.

En la habitación Krim estaba terminando de cambiar su camisa mientras Kurai lo miraba fijamente. Ella tiene un interés raro por Krim, pero no estoy segura de lo que es, no parece ser algo romántico al menos.

— Pensé que seguían durmiendo —

— Si lo que nos dijo ese ángel, Caith, es tan serio como suena, no sería buena idea levantarse muy tarde — Dijo Krim.

— Supongo —

Entonces, un ruido extraño sonó en la habitación.

— Hay comida?— Era el estómago de Kurai.

— Vincent está preparando el desayuno — Le respondí — Despierten a Ikaros y vayan —

— No viniste tú a despertarnos? Por qué no terminas?— Krim sonrió y me preguntó eso… Ugh.

— Ehhh… N-no tienes curiosidad por cómo se sienten sus alas?— Improvisé algo para no tener que hacerlo.

—…Supongo que puedo hacerte el favor — Respondió el con una expresión seria mientras se acercaba a la cama de Ikaros. Por alguna razón Kurai fue al otro lado de la cama. Supongo que lo logré…?

En cuanto los dos estuvieron preparados a cada lado de Ikaros y luego de un corto contacto visual entre los dos, Krim y Kurai tomaron las alas de Ikaros.

— Hyaah…?!— Ikaros se levantó de repente y golpeó con sus alas a los dos al extenderlas rápidamente.

Aunque tenían una marca roja en la cara, ambos tenían una expresión que demostraba que valió la pena. Ahora yo también tengo curiosidad… Pero parece una molestia. Me pregunto si Vincent sabe cómo se sienten.

— Qué están haciendo?!— Gritó Ikaros.

— Despertándote — Respondió Kurai.

— Vincent ya debe tener la comida lista — Supongo que debería volver con él, quizás incluso lo ayude con algo.

Pero, en cuanto salí de la habitación, vi algo que iba a ser una molestia.


Hm~ Hm~

Terminé de preparar el desayuno mientras tarareaba. Me pregunto si les gustará.

— Vincent, ven rápido!— Tsu llegó corriendo al comedor y me urgió a salir, claramente no podía significar nada bueno.

Me apresuré lo más que pude en ir a cubierta, aunque no podía evitar sentirme un poco triste por la comida.

Mientras estaba en camino, el barco aceleró nuevamente mientras cambiaba de curso. Si tenemos que ir a otro lugar, supongo que no es un ataque al menos, aunque podría ser algo que nos forzara a movernos también… Hmm…

Llegué a la cubierta con Tsu detrás y vi a Krim y Kurai listos para pelear, pero con qué?

Miré en la dirección a la que estaban observando, allí pude ver un pueblo… o parte de él.

— Tu arma — Krim me lanzó a mi Rydel en cuanto llegué. Perfecto para destruir a algunos demonios.

Por si no ha quedado claro, el pueblo al que estamos yendo estaba siendo atacado por demonios. Esto no es algo raro en el último tiempo, los ataques de demonios se han intensificado desde hace dos años atrás más menos.

Pero este ataque tenía algo especial.

Los pueblos suelen caer rápido si no hay nadie para defenderlos, pero este es un pueblo alejado de cualquier ciudad principal, por lo que no debería haber muchas personas capaces, mucho menos suficientemente fuertes para detenerlos realmente.

Pero aquí, una sola persona está deteniendo a los demonios.

Estamos lejos así que no puedo ver detalles, pero es una sola persona de pie frente al pequeño ejército de demonios que intentan destruir el lugar, está utilizando una barrera semitransparente que mantiene encerrados a todos los demonios en la mitad destruida del pueblo.

Mientras nos acercábamos, pude comenzar a escuchar la voz de una chica, la chica que defendía el pueblo.

— No necesitan hacer esto! Por qué siguen ordenes como esas?!—

Está intentando hablar con los demonios? Eso es tonto, ellos son el mal y ya.

— Niña… Las órdenes del Rey son absolutas sin importar quién seas!—

El demonio le respondió.

……El demonio le respondió?!

— No es tarde para cambiar de opinión… Lo humanos no son nuestros enemigos!— Grito ella.

Espera… nuestros?

Llegamos a una distancia a la que podíamos verlos bien…

Era una chica de cabello anaranjado con unas orejas y colas como de gato, llevaba una blusa de estilo oriental morada y unos pantalones cortos que parecían cómodos para moverse. Ella era bastante linda y verla conteniendo a tantos demonios a la vez era una vista increíble, pero eso no era lo que más me llamaba la atención…

— Hooh, esto es interesante — Dijo Krim — Una demonio defendiendo a los humanos —

En la frente de la chica crecía un cuerno.

— Podemos cambiar y ser amigos, es lo que quería mi padre!— Continuó ella.

— Tu padre ya no importa. Larga vida al Rey!—

Una demonio buena… No, imposible. Debe tener un motivo detrás.

Un demonio NO PUEDE ser bueno.

Krim tocó mi hombro y en cuanto lo miré, me dijo:

— Vincent, si no es un enemigo no lo ataques —

— Pero, es una demo-…—

— No la ataques — Estaba completamente serio.

— Por esta vez estoy de acuerdo con él — Lo respaldó Kurai.

— Yo… Los demonios…—

— Vincent — Me di la vuelta para ver a Tsu — Tranquilízate —

Tienen razón. Primero tengo que saber lo que pasa, luego puedo matarla.

Asentí hacia los demás.

— Estamos a distancia de desembarque!— La voz de Ikaros llegó desde la cabina de mando mientras detenía el barco y venía hacia nosotros.

Tomamos nuestras armas y lanzamos cuerdas para bajar, normalmente usaríamos escaleras de mano pero esta vez es una emergencia y esto será más rápido.

En cuanto llegamos al suelo, la demonio miró en nuestra dirección sin dejar de bloquear a los otros demonios, ahora que estamos aquí puedo sentir que es una barrera de poder mágico generada por ella sin ningún artefacto. Ella no es nada débil.

— N-no los maten! Solo siguen ordenes!— Gritó ella en cuanto nos vio.

— Si les ordenan que destruyan un pueblo y obedecen debo dejarlos hacerlo?— Dijo Krim.

— E-eso…— La demonio titubeó, no lo pensó demasiado, no? Después de todo, ella también está de su lado.

— Tsu, Kurai, pueden usar un ataque en área?— Continuó él.

— Hm… Sí… Okay — Respondió Kurai.

— Claro, tomo la derecha — Siguió Tsu.

Las dos se separaron, cada una a una dirección, con Tsu yendo a la derecha y Kurai a la izquierda. Krim, Ikaros y yo nos quedamos en el centro para enfrentar a los que queden.

— No los dejaré hacer eso! Aún si han hecho cosas malas… Solo siguen órdenes! No son malos!—

— Baja tu barrera, no es una pregunta — Le dije.

Ella no retrocedió ni un paso, parecía convencida de que hacía algo bueno.

— Así debería ser! Un combate a muerte!— Gritó el demonio que parecía su líder. Los demás de ellos gritaban al unísono “Muerte! Muerte!” detrás de él, era asqueroso.

— Los puedes seguir defendiendo así? Estamos en guerra, pero cuando logremos la paz podremos tomarnos las manos, humanos y demonios podrán curar sus heridas juntos — Dijo Krim — Por eso, ayúdanos a lograrlo —

Él estiró su mano hacia ella con una sonrisa en el rostro… Siempre fue ese tipo de persona? Supongo que algo de eso tienes que tener para ser un héroe, no?

— Paz… Juntos…— La demonio parecía dudar cada vez más — Entonces… luego de esto… Me ayudarías a traer paz?—

La demonio comenzó a estirar su mano para tomar la de Krim.

— Para eso estoy aquí —

Entonces, él la tomó.

La barrera bajó inmediatamente mientras ella se sonrojaba.

Los demonios ahora podían venir hacia nosotros como quisieran, son unos cincuenta, con los hechizos de Kurai y Tsu deberían quedar unos quince como mucho cuando terminen.

— Aaaaarrrgh! —

En cuanto cayó la barrera, dos grandes explosiones resonaron en el campo de batalla mientras se creaba un mar de fuego en ambos lados del ejército demonio. Sus gritos no tardaron en llegar, tanto los de dolor como los de aquellos que se lanzaron hacia nosotros.

Uno, dos, tres…

Como esperaba, no son ni quince. Con solo trece de ellos no es suficiente ni siquiera para parar a uno de nosotros.

Aceleramos al unísono hacia los demonios.

Krim llegó primero con su aceleración extraña y le cortó la cabeza a uno de ellos, como se esperaba.

Mis balas acabaron con dos más de ellos rápidamente, pero antes de poder disparar la tercera, Ikaros se adelantó y agitó horizontalmente su espada…

No había tenido la ocasión de mencionarlo hasta ahora, pero Ikaros, aún con lo torpe que puede ser, es realmente fuerte.

Cuatro demonios fueron cortados a la mitad con solo ese espadazo.

Siempre me sorprende la gran diferencia entre su comportamiento normal y su fuerza, no pude evitar quedarme parado al ver eso.

— Estamos en un combate niño!— Gritó Krim mientras le cortaba la cabeza a otro demonio.

— No me digas niño!— Comencé a moverme de nuevo y disparé una vez más matando a otro demonio.

!!!

Entonces, vi una espada cortarme a la mitad.

!!!

Una premonición…?!

— No me subestimen!!— Gritó el líder demonio.

Salté hacia atrás para evitar la espada de mi visión y tal como había visto, la espada del líder demonio cortó el aire donde había estado.

— Vincent, ese es tuyo — Krim me dejó atrás y fue con Ikaros a enfrentarse a los demonios restantes, también se veían fuertes, pero el líder era el peor.

Bueno, de todas formas yo soy más fuerte.

— No sé cómo esquivaste ese ataque, pero un niño no puede derrotarme!—

El líder demonio se abalanzó hacia mí con su espada en alto, se notaba que había entrenado bastante… Pero no es suficiente!

Él atacó cortando con su espada hacia abajo y yo lo esquivé saltando ligeramente hacia un lado, no hay problema. Aprovechando esa apertura lo apunté con mi arma a la cara, él se agachó antes de que disparara, pero no es problema, es justo como quería.

Sin disparar a Rydel, estiré mi brazo robótico hacia él y tomé su cabeza sin ninguna resistencia por la posición incómoda en la que estaba. Final.

— Argh!— Fue lo último que dijo antes de morir con su cabeza aplastada.

Sacudí mi mano para quitarme algo de la sangre que quedó en ella, si no la limpió bien pronto será una molestia quitarla luego.

Los demás ya habían terminado con los demás demonios.

No hay piedad para el mal.

— Bien, eso es todo — Pensé en voz alta.

— Sí, el pueblo está a salvo ahora — Me respondió Krim… Él está inusualmente heroico hoy.

— Entonces…— La demonio volvió a tomar la mano de Krim — Ahora, me ayudarás?—

— Primero, deberíamos presentarnos —

— Oh! Lo siento, eso fue descortés de mi parte —

Entonces, la demonio se inclinó un poco y dijo:

— Mi nombre es Bow Sith, la hija de Caith Aquelus Sith —



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Categorías: Héroes penosos