Comienza la segunda parte del examen y el gremio de domadores se pone a prueba una vez más.


Aproximadamente medio año antes del examen de ingreso para la Escuela Preparatoria de Héroes.

La gente a menudo es forzada a hacer cosas que no quiere, por lazos de obligación que no pueden ser rotos por un solo individuo.

En este caso, era el empleo de Randolf «el Verdadero», el aventurero clase S del Reino Orbaume, en la escuela.

«¿Quieres que sea profesor temporal en una Escuela de Aventureros?». preguntó Randolf.

«Así es. Por supuesto, no es una Escuela de Aventureros ordinaria. La escuela de la que soy director se conoce como la ‘Escuela Preparatoria de Héroes’, y me gustaría tenerte como instructor temporal», dijo la mujer elfa que estaba reunida con él.

Por una vez, no era un noble poderoso quien le hacía una petición a Randolf. La mujer tenía rasgos bien definidos y una belleza digna, pero también un aire sabio y valiente.

Era la directora de la escuela a la que asistían muchos niños de la nobleza, aunque muchos eran hijos tardíos de sus familias, como hijos terceros o hijas cuartas. Muchos de los que se graduaron en la escuela se convirtieron en aventureros de clase C, y nadie podía asistir sin una cierta cantidad de talento o el trabajo duro necesario para superar la falta de talento.

No tenía voz directa en la política ni en los asuntos militares, pero su voz era tan influyente como la del conde o marqués medio.

«Cállate y asiente con la cabeza, Rand».

«No uses un apodo por el que no me han llamado desde mis días de aventurero, Meorilith».

La mujer elfa era una antigua aventurera de clase A que había estado activa durante el mismo periodo de tiempo que Randolf «el Verdadero», e incluso habían formado grupo juntos en alguna ocasión.

Randolf era conocido por ir a menudo en solitario, pero no es que nunca antes hubiera unido fuerzas con otros aventureros. En el pasado, Meorilith era conocida como la aventurera con la que Randolf había formado grupo con más frecuencia.

«Qué frío eres», dijo Meorilith. «Pasamos muchas noches apasionadas juntos, ¿verdad? El té que me preparabas por la mañana siempre olía tan especial».

Siempre se había especulado con la posibilidad de que Meorilith fuera amante, concubina o novia de Randolf, y estas especulaciones se consideraban ahora verdades a medias.

En las obras en las que Randolf «el Verdadero» era el protagonista, tener a Meorilith como heroína era siempre una elección popular, y las canciones de los bardos hacían la razonable suposición de que ambos nunca se habían casado porque no podían imaginarse convirtiéndose en marido y mujer y habían decidido que lo mejor era continuar su relación actual como rivales amistosos.

Tras el retiro público de Randolf de las aventuras, muchos dijeron que la elfa Meorilith sólo había sido nombrada directora de la Escuela Preparatoria de Héroes por la realeza y los nobles para que la nación mantuviera una conexión con Randolf.

Y había bastante de verdad en eso.

«No me mientas», dijo Randolf. «Cada vez que te preparaba té, te quejabas de que el olor te hacía torcer la nariz. ¿Lo has olvidado?»

Como hombre, Randolf tenía necesidades físicas. Meorilith se dedicaba a lo mismo que él y tenía una capacidad similar; en muchos sentidos, era mejor compañera que las mujeres que utilizaban los nobles y los mercaderes que conspiraban para relacionarse con él.

Por cierto, la razón por la que nunca se habían casado era la diferencia de personalidades. Se llevaban bastante bien por la noche, pero ninguno de los dos había imaginado que fuera posible que vivieran juntos también durante el día.

«Dije que era especial, nunca que fuera bueno», dijo Meorilith. «De todos modos, el período de tu empleo será de dos años. Cuento contigo».

«Espera. No recuerdo haber dicho que aceptaría. ¿Has olvidado que la última vez que lo hice te dije que no volvería a hacerlo?». le recordó Randolf.

Había trabajado en la escuela de Meorilith a petición de ella una vez en el pasado. Pero era un aventurero retirado, y no era el tipo de persona que quisiera involucrarse con aventureros actuales y aspirantes.

La aventura era una profesión peligrosa con una alta tasa de mortalidad. Por mucha habilidad y talento que uno tuviera, era un hecho inmutable.

Aunque era mejor que algunos de los otros trabajos que los nobles le pedían, Randolf no obtenía ningún placer de la tarea de entrenar a chicos y chicas jóvenes para que pudieran dedicarse a tal profesión.

También había razones psicológicas para no querer hacer este Trabajo.

«¿Odias ver a tu yo del pasado en sus ojos jóvenes, llenos de esperanzas y sueños?». preguntó Meorilith.

«… Sí», respondió Randolf.

La miró como diciéndole que, si ya lo sabía, no hacía falta que lo dijera en voz alta.

También maldijo a su yo del pasado bocazas que hablaba a gritos de sus sueños para el futuro.

«Yo era un mocoso que no sabía nada de cómo funcionaba el mundo. Pensaba ingenuamente que, si tenía la habilidad y el dinero, podría conseguir cualquier cosa… Podría recuperar mi patria. Ese es un pasado que preferiría olvidar».

Randolf provenía de un asentamiento elfo en un bosque. El asentamiento había tenido varios intercambios con sociedades humanas, y el clan que vivía allí había llevado una vida sencilla pero cómoda con la naturaleza que les rodeaba.

La paz del asentamiento se rompió por una estampida de monstruos de un Nido del Diablo que estaba lejos del bosque. La horda de monstruos, habiendo crecido demasiado y desbordado su hábitat anterior, había puesto sus ojos en el bosque en el que vivía el clan de Randolf para utilizarlo como su próximo hogar.

El asentamiento contaba con numerosos arqueros capaces, magos espirituales, guerreros ligeramente armados y luchadores desarmados. Pero los monstruos eran demasiados, y el asentamiento no pudo resistirlos.

Tras sufrir muchas pérdidas, los elfos supervivientes, incluido el entonces joven Randolf, huyeron del bosque. Se apoyaron entonces en los humanos con los que habían tenido relaciones… el Reino de Orbaume, y se trasladaron allí.

Fue entonces cuando Randolf se juró a sí mismo que algún día recuperaría su tierra natal. Y fue bendecido con el talento que le permitió tener siempre presente ese juramento.

De adulto, se convirtió en aventurero y mejoró sus habilidades con el arco sin experimentar nunca un muro que limitara su crecimiento. Tardó poco tiempo en ganar importantes sumas de dinero y convertirse en un aventurero de clase B. Pero como era elfo, su desarrollo fue más lento que el de los humanos, y el bosque que era su tierra natal hacía tiempo que se había convertido en un Nido del Diablo con una Mazmorra dentro.

Aun así, los monstruos no eran tan poderosos como para que Randolf no pudiera derrotarlos por sí solo. Sólo necesitaba más números para purificar el Nido del Diablo y la Mazmorra.

Para purificar el Nido del Diablo y la Mazmorra, los monstruos—que eran la fuente del miasma—debían ser erradicados por completo. Aunque se derrotara al monstruo más poderoso que gobernaba el Nido del Diablo y a los jefes de la Mazmorra, si quedaban vivos incluso monstruos débiles como los Goblins y los Conejos Cornudos, la corrupción del miasma se detendría, pero nunca desaparecería por completo.

Un día, un nuevo monstruo poderoso volvería a gobernar el Nido del Diablo, y nuevos jefes reaparecerían en la Mazmorra varios días o varios meses después.

Por lo tanto, el Nido del Diablo y la Mazmorra debían revisarse constantemente en busca de monstruos y mantenerse en un estado casi perfecto. Entonces, el Nido del Diablo se convertiría en tierra ordinaria y la Mazmorra se derrumbaría. El tiempo necesario para la purificación dependería del grado de corrupción.

Para un Nido del Diablo como el Continente Demoníaco, que había cambiado mucho respecto a su forma original, la purificación mediante este método llevaría un tiempo insondable. Pero el bosque que era la tierra natal de Randolf era en su mayor parte un bosque ordinario y natural, aparte de los monstruos que en él desovaban, por lo que sólo llevaría unos pocos días.

Randolf tenía los contactos y el dinero para reunir suficientes compañeros que trabajaran con él durante los pocos días que le llevaría. Solicitó colaboradores a través de los Gremios, donó grandes sumas a las Iglesias a cambio de la ayuda de los clérigos enviados, e incluso tendió la mano a los demás elfos que habían vivido en el bosque. Nunca dudó de que sería capaz de recuperar su tierra natal.

Pero todas sus expectativas fueron cruelmente traicionadas.

Se descubrió que en el bosque que ahora era Nido del Diablo crecía una hierba medicinal con la que se podía crear una medicina milagrosa para una enfermedad incurable; y en la Mazmorra había un suelo del que se podía extraer Mythril y mineral de Adamantita.

Ambas se convirtieron en importantes industrias en el ducado donde estaba el bosque, y el proyecto de Randolf para purificarlo tuvo que quedar en suspenso.

Con ello, el Gremio de Aventureros se volvió incapaz de apoyar el plan de Randolf, aunque fuera un aventurero de clase B. Además, el bosque y su Mazmorra se habían convertido en coto de caza para muchos aventureros, por lo que casi no había aventureros dispuestos a ayudar a Randolf a llevar a cabo el plan a nivel individual.

Incluso la Iglesia de Alda, que predicaba fervientemente a favor de la erradicación de los monstruos y la purificación de los Nidos del Diablo, se mostraba poco decidida cuando se trataba de purificar el bosque que era la patria de Randolf. Le dijeron que no podían privar a la gente de su sustento, y que había Nidos del Diablo y Mazmorras más peligrosas que necesitaban ser purificadas.

Y lo más chocante de todo era que los otros elfos que habían vivido en el bosque tampoco querían ayudar a Randolf.

Habían pasado unos cien años desde que el bosque se convirtió en un Nido del Diablo. Incluso para los elfos, no era poco tiempo; ya habían construido nuevos cimientos y ahora llevaban una vida estable.

Aunque retomaran su tierra natal, vivir allí significaría tirar por la borda las nuevas vidas que tanto esfuerzo les había costado construir para volver a empezar. Y aunque se decidieran a hacerlo, no había garantías de que los demás elfos les siguieran.

Por lo tanto, los elfos optaron por continuar con sus nuevas vidas, y ninguno se unió a Randolf.

El día en que Randolf se vio obligado a darse cuenta de que era el único que había jurado recuperar su tierra natal a toda costa, probó una amarga decepción de la que nunca se libraría. Sintió como si toda la vida que había vivido hasta entonces, todo el entrenamiento que había realizado, todo aquello estaba siendo rechazado.

«… Recuerdo aquellos tiempos. Siento no haber podido ser de más ayuda», dijo Meorilith.

«Basta ya. Que me pidas disculpas sólo me hace perder prestigio», dijo Randolf. «Fui yo quien tendió la mano y pidió ayuda. Y yo soy el que renunció a ella. Eso es todo».

Si nadie hubiera intentado ayudar a Randolf entonces, tal vez ya habría abandonado el Reino de Orbaume.

Pero algunos nobles y varios de sus compañeros de aventuras, entre ellos Meorilith, se habían mostrado comprensivos.

Por eso Randolf había continuado en la profesión de aventurero. Había perdido su objetivo, pero no conocía otra forma de vida. Sólo había dejado de ser aventurero y de rezar a ningún dios una o dos décadas después de alcanzar la clase S.

Quizá simplemente estaba cansado. O tal vez le disgustaban las crecientes restricciones a su libertad a medida que se hacía más fuerte y se encontraba en compañía de más nobles del reino. O tal vez estar en compañía de estos nobles le había hecho ver demasiados aspectos negativos de los humanos. Ni siquiera el propio Randolf recordaba la razón exacta por la que había abandonado.

Si nunca se hubiera rendido, y hubiera llamado a la purificación del bosque que era su patria como aventurero de clase A o S en lugar de clase B, tal vez el duque y el Gremio de Aventureros habrían cooperado con él. Incluso si los elfos que una vez vivieron allí con él no le hubieran seguido, tal vez otros elfos se habrían trasladado al bosque, atraídos por su reputación.

Pero Randolf no deseaba tales cosas.

La razón por la que renuncié… Tal vez sea porque por fin fui capaz de rendirme y darme cuenta de que la patria que deseaba nunca volvería de verdad, nunca… pensó Randolf reflexionando.

«Ya está bien de hablar del pasado. Siento haber desviado la conversación», dijo Randolf, cambiando enérgicamente el tema y la trayectoria de sus pensamientos. «Entonces, ¿por qué quieres que sea instructor? Conociéndote, tiene que haber alguna razón».

«Sí, por supuesto», dijo Meorilith. «Después de todo, hay mucha gente que quiere ser instructora en mi escuela».

Ser profesor o instructor en una Escuela de Aventureros era el Trabajo soñado para un aventurero retirado. Pero un profesor o instructor en la Escuela Preparatoria de Héroes sería pagado varias veces más que aquellos en otras Escuelas de Aventureros.

Y si formaban conexiones con los padres de los estudiantes—nobles y mercaderes ricos—podían incluso buscar un mejor empleo como guardias personales o instructores de combate.

También había aventureros apasionados y en activo que optaban por tomarse descansos para instruir a jóvenes con talento. Era raro que la escuela hiciera una petición formal para que alguien trabajara temporalmente como instructor, pero no inaudito.

Pero ciertamente no era común que la escuela hiciera esta petición a un aventurero de clase S con circunstancias tan complicadas como las de Randolf.

«Lo cierto es que se está formando un ejército para intentar retomar el antiguo territorio de Scylla en el Ducado de Sauron. Y parece que planean que tú formes parte de él», dijo Meorilith.

«Ya lo sabía… Ese jovencito Rudel está detrás de todo esto, ¿verdad? Parece que es mucho más descarado de lo que yo creía—dijo Randolf, recordando al joven duque que había ignorado su advertencia.

Pero Meorilith negó con la cabeza. «Son los otros duques. He oído que el duque Hartner, el duque Jahan y el duque Farzon están especialmente deseosos de que esto ocurra.»

«… Todos ellos son duques de ducados donde florece el culto a Alda. Hartner quiere que logre grandes cosas en la batalla para retomar el territorio, y usar eso para convertir el Ducado de Sauron de un ducado alineado con Vida a uno alineado con Alda, supongo.»

Darcia podría haber esbozado una sonrisa amarga si hubiera escuchado esta conversación, pero el Ducado de Sauron era una región donde había un fuerte deseo de rechazar las razas de Vida, a pesar de que muchos allí adoraban a la propia Vida. Podrían ser descritos como una facción anti-nueva raza de adoración a Vida.

El Ducado de Hartner limitaba con el Ducado de Sauron directamente al sur; tal vez querían relaciones de cooperación no sólo económica y políticamente, sino también en términos de religión.

El Ducado Jahan era originalmente un ducado en el que el culto a Botín florecía más que el culto a Vida y Alda, pero había empezado a volcar su poder en el culto a Alda desde que el actual duque se convirtió en cabeza de la familia Jahan.

Era posible que el actual duque, que había nacido como Titán debido a un atavismo, sintiera la necesidad de unir a los nobles bajo su mando mostrando una fuerte devoción por el culto a Alda.

«En cuanto a Jahan… puedo especular sobre sus motivos, pero no puedo decir nada con certeza. En cuanto a Farzon, estoy seguro de que quiere contratarme en lugar de ese jovenzuelo», dijo Randolf.

Desconocía casi por completo al duque Jahan, así que no sabía mucho de él.

Sospechaba que el duque Farzon quería contratarlo en lugar de Heinz, que en el momento de esta conversación seguía dentro de la Mazmorra.

«Por eso te ofrezco empleo. No importa lo que digan las otras casas de los duques, puedo defenderte de ellos. Sería un problema si protestaran formalmente por tu contratación con un documento que llevara sus firmas conjuntas, pero estoy seguro de que no llegaremos a eso», dijo Meorilith.

«Si los duques estuvieran en buenas relaciones como para hacer eso, probablemente intentarían contratarme con sus firmas conjuntas», dijo Randolf. «Muy bien. Acepto tu oferta».

«No has tardado mucho en aceptar. ¿Has caído en desgracia?»

«No, pero personalmente también me gustaría evitar involucrarme con el Ducado de Sauron. Y…. estoy seguro de que ellos no vendrán a la Central».

«¿Ellos?»

«La maestra de la que recientemente he estado recibiendo instrucción, y aquellos relacionados con ella».

Vandalieu todavía no había liberado a Botín de su sello en el Continente del Rey Demonio. En este momento, Randolf ignoraba la intención de Vandalieu de matricularse en la Escuela Preparatoria de Héroes en Orbaume Central.

Del mismo modo, Meorilith era inconsciente de esto también. La sede del Gremio de Aventureros en el Ducado de Alcrem había dado a Vandalieu una carta de recomendación. Pero ellos no informarían a la Escuela Preparatoria de Héroes sobre eso.

Así, Randolf aprendió solamente sobre el plan de Vandalieu de entrar en la Escuela Preparatoria del Héroe después de que él hubiera elegido ya su nuevo nombre y aspecto falsos.

• • •

Esta gente… quiero decir, ¿qué esperan aprender inscribiéndose en una Escuela de Aventureros?

Randolf, que había cambiado el color de su pelo a rojo y ahora iba por el nombre falso de Dandolip, miraba donde estaba Vandalieu con ojos de muerto.

Él había notado a Vandalieu inmediatamente cuando fue levantado en el aire por Pauvina, la más alta de los aspirantes.

Dado los rumores que Randolf había oído sobre los hechos increíbles de Vandalieu, y la energía que él había sentido después de realmente resolver y de hablar con él… No importa cómo Randolf lo pensaba, él no podría pensar en una cosa posible que Vandalieu necesitaría aprender en esta escuela.

¿Está aquí para hacer contactos, o es un camuflaje para encubrir algo que planea hacer en Orbaume? ¿Es este el primer paso de un plan para dar un concierto en Orbaume como hizo en Morksi y Alcrem para crear aún más fans de él y sus compañeros? … Eso es ciertamente posible.

Randolf se había guiado en parte por la Senda Artística de Kanako; consideraba que un concierto era un objetivo realista y plausible para Vandalieu.

Mercaderes, aventureros y mercenarios de toda la nación se reunían en la capital del Reino de Orbaume, así como los nobles de todos los ducados. Además, el próximo año se celebrarían elecciones para elegir al próximo rey.

Si Vandalieu ganaba influencia en la capital ahora, se aseguraría de que su influencia se extendiera por todo el reino.

Y todo lo que estaría haciendo era dar un concierto. No estaba consumiendo drogas ilegales ni realizando rituales prohibidos por la ley. Era un evento de entretenimiento perfectamente legal que consistía en cantar y bailar.

Nadie llevaría a cabo una investigación sobre un concierto así, y aunque lo hicieran, no encontrarían nada. No había ninguna base legal para impedirlo.

… Incluso si ese es su plan, no tengo ningún deseo de impedirlo.

Este posible plan de Vandalieu no era algo que motivara a Randolf a interferir. Después de todo, era apenas un concierto ordinario. Y él no sentía motivado para interferir con ningunos de los otros objetivos de Vandalieu de los cuales él era actualmente consciente.

Sería una historia diferente si Vandalieu conspirara para subvertir el estado y conquistar el mundo, pero él apenas realizaba actividades religiosas y abogaba por los derechos de las razas de Vida… en otras palabras, actividades políticas.

Ninguna de ellas interesaba a Randolf. Lo que más le preocupaba era si Vandalieu y sus compañeros se habían dado cuenta de su verdadera identidad o no.

Sé que no puedo cambiar mi disfraz ni el nombre falso de ‘Dandolip’, pues el personal y los alumnos de la escuela ya me conocen por ellos, pero… debería haberme hecho un disfraz más elaborado. Al menos debería haberme disfrazado de humano y no de elfo, pensó con pesar mientras observaba a Vandalieu.

Pero Vandalieu no mostró ninguna reacción notable. Era difícil imaginar que no se hubiera dado cuenta en absoluto, pero Randolf no podía permitirse comprobarlo ahora. Así pues, bajó del escenario y volvió a su Trabajo de supervisar el examen de ingreso.

• • •

El propósito de las pruebas de la tarde era comprobar la habilidad de los aspirantes en combate, así como sus habilidades y conocimientos básicos como aventureros.

«El examen es exactamente como nos dijeron», murmuró Vandalieu.

La dificultad de las pruebas era bastante baja para él, pero un obstáculo importante para los demás aspirantes.

«Hmph. ¿Empiezas a tener miedo? Tal vez deberías renunciar e ir a una Escuela de Aventureros ordinaria», se burló uno de ellos, habiendo oído a Vandalieu hablar consigo mismo.

Normalmente, las escuelas de aventureros no tenían exámenes de ingreso. Después de todo, eran escuelas para los que no tenían la capacidad de combate, las habilidades, o el conocimiento necesario para ser aventureros. Pero la Escuela Preparatoria de Héroes no necesitaba estudiantes tan ordinarios.

Estas pruebas nunca podrían ser pasadas por niños ordinarios que aspiraran a convertirse en aventureros. Los hijos de los nobles contrataban profesores privados e instructores de combate para aprender de ellos en preparación para estas pruebas.

«¿Quizá has recibido puntos adicionales por Habilidades Únicas? Ah, es verdad, eres domador, ¿no? Debe de ser eso», continuó burlándose el otro chico.

Si las pruebas no servían más que como barreras, los aspirantes que poseían Habilidades Únicas las suspendían si eran plebeyos. Por eso existía un sistema para conceder puntos adicionales a quienes poseían Habilidades Únicas y otros talentos.

Parecía que el muchacho había asumido que Vandalieu había recibido puntos adicionales a través de este sistema.

Y tenía razón.

«Sí, tienes razón», dijo Vandalieu.

No le había contado a la escuela sobre sus Habilidades Únicas, pero la escuela lo valoraba mucho como un domador lo suficientemente hábil como para poseer el Título de ‘Domador Genio’. Con eso y el hecho de que era un Dhampir, una raza poco común, ya tenía suficientes puntos adicionales si su objetivo era simplemente aprobar el examen de ingreso.

Por lo tanto, Randolf y Meorilith habían estado dando pistas silenciosas de que Vandalieu y Pauvina no necesitaban realizar el examen en absoluto, pero no les habían prestado atención.

«Como pensaba. Por eso los odio, malditos domadores, que dependen de monstruos inmundos…” dijo el otro chico.

Era de noble cuna y no tenía verdaderas intenciones de convertirse en aventurero. Era el cuarto hijo de la familia de un barón, por lo que tenía la intención de unirse a una orden de caballeros después de ganar cierto grado de prestigio. Por lo tanto, tenía la forma de pensar discriminatoria que era común entre los nobles.

Él también tenía la astucia para hacer uso de la regla tácita de la Escuela Preparatoria de Héroes de que las familias de los estudiantes no debían involucrarse en las cosas que sucedían en la escuela y durante los exámenes, y la regla oficial que indicaba que todos los estudiantes debían ser tratados con igualdad.

El muchacho creía que, a pesar de que Vandalieu era hijo de una condesa honoraria y él sólo era hijo de un barón, Vandalieu no podría tomar represalias aquí, y no se podría hacer nada, aunque luego corriera llorando a su madre.

Pero de quien tenía que tener cuidado no era de Vandalieu, sino de Pauvina, que lo miraba fijamente.

«… ¿Q-qué? ¿Tienes algo que decir?», dijo desafiante.

«¿Qué pruebas estás haciendo?» preguntó Pauvina.

El chico no tenía ninguna obligación de responder con sinceridad, pero tal vez pensó que negarse a contestar sería visto como una huida. «¡La prueba de espada, la de escudo y la del tiro con arco!», dijo.

«Ya veo. Ya veo. Voy a hacer las mismas pruebas», dijo Pauvina.

«¡¿Q-qué?! ¡¿Qué significa esto?!»

«¡Bueno, entonces me voy, Van!».

«Hasta luego», dijo Vandalieu. «Hazlo lo mejor que puedas, pero no te pases».

Pauvina dejó a Vandalieu en el suelo y se dirigió alegremente hacia el campo de pruebas, dando pasos pesados mientras caminaba

«¿Q-qué fue eso?» dijo el chico desconcertado mientras se alejaba tras ella.

Vandalieu esperaba que Pauvina pretendiera superarle en resultados en todas sus pruebas.

“No tenía intención de destacar más de lo que ya lo hago con mi apariencia, raza y ascendencia, pero no puedo evitar que la gente me ataque”, murmuró Vandalieu. “Estoy seguro de que Pauvina lo pondrá en su lugar sin exagerar”.

Creyendo que Pauvina no haría nada como pulverizar por completo a los maniquíes o incapacitar y herir gravemente a los examinadores, se dirigió al lugar donde se celebrarían sus propias pruebas.

En la prueba que examinaba los ataques a distancia de los aspirantes utilizando habilidades como «Tiro con arco» y «Técnica de lanzamiento», obtuvo una puntuación ligeramente superior a la de los demás aspirantes utilizando cuchillos arrojadizos.

Durante la prueba de combate cuerpo a cuerpo, el examinador que probaba su «Técnica de bastón» hizo una expresión extraña.

“¿No vas a usar tus garras?” preguntó.

“No, porque mis garras son así”, dijo Vandalieu mientras extendía sus garras para mostrárselas.

Las comisuras de la boca del examinador se tensaron al ver las garras afiladas que eran más largas que cuchillos. “Estoy seguro de que cortan mejor que los cuchillos. Pero he oído que los Dhampirs también poseen la habilidad «Fuerza sobrehumana». Parece que sería peligroso si un examinador probara tu “Técnica de lucha sin armas” usando equipo de entrenamiento en lugar de una armadura real”.

En verdad, Vandalieu poseía la habilidad ‘Fuerza Trascendente’, la forma superior de la habilidad ‘Fuerza Sobrehumana’, y podría fácilmente masacrar a un examinador que llevara una armadura real, incluso sin usar los fragmentos del Rey Demonio.

«Así es. Así que utilizaré la ‘Técnica del Bastón’ en su lugar», dijo Vandalieu.

Pero no mostró signos de usar su verdadera fuerza y logró una puntuación razonablemente alta en su prueba de “Técnica del bastón”.

También realizó pruebas como diferenciar plantas medicinales de venenosas e identificar razas de monstruos a partir de sus huellas. Le dijeron que cualquier método estaba permitido, por lo que sin darse cuenta se destacó de mala manera cuando lamió las plantas para diferenciarlas por sabor.

“Incluso si lames la planta para comprobar si es venenosa, no sirve de nada saberlo si el veneno entra en tu cuerpo en el proceso. Pero… Los Dhampirs poseen la habilidad “Resistencia a los efectos de estado” desde su nacimiento, por lo que no debería haber problemas aquí. Pero aquellos sin habilidades de resistencia, no intenten imitarlo. E incluso si tienen la habilidad, hay venenos fuertes a los que no podrán resistir, dependiendo del nivel de tus habilidades. ¡Haz tu mejor esfuerzo para diferenciar las plantas usando tus ojos! Dijo el examinador como advertencia a todos los solicitantes, regañando indirectamente a Vandalieu.

“Sí, señor”, dijo Vandalieu.

Debido a lo indirecto de las palabras del examinador, no se dio cuenta de que lo estaban regañando y simplemente pensó que el examinador estaba ofreciendo instrucción.

Sin embargo, Vandalieu poseía «Inmunidad a los efectos de estado» en lugar de «Resistencia a los efectos de estado», por lo que incluso beber una taza entera de veneno que podría matar a una persona común y corriente con una sola gota no tendría ningún efecto en él.

Sería problemático que la gente me imitara, así que tengo que ser más discreto. El instructor incluso se tomó el tiempo de instruir a la gente a mi alrededor. Como se esperaba de la Escuela Preparatoria de Héroes, pensó Vandalieu, impresionado.

Y luego vino la prueba de magia, aquella por la que Vandalieu estaba más preocupado.

«Ahora bien, golpea ese objetivo con un hechizo ofensivo», dijo el examinador.

Los objetivos a los que apuntaba estaban hechos de madera y estaban ubicados a unos diez metros de distancia. Uno tras otro, los otros solicitantes produjeron llamas, hielo, masas de roca y espadas de viento para golpear a sus objetivos.

Todos estos eran hechizos rudimentarios. Uno de los estudiantes sorprendió al examinador al producir una lanza de llamas que atravesó directamente a su objetivo.

Para no destacar, Vandalieu necesitaba lograr una puntuación menor que esa sin usar magia de atributo de muerte o “Magia Espiritual de Dios”. Pero su enorme cantidad de maná hacía que fuera muy difícil hacer lo mismo que la gente común.

Si un mago ordinario usara ‘Bala de Maná’, un hechizo sin atributos que simplemente creaba una esfera concentrada de Mana, sería aproximadamente del tamaño de un puño, o tal vez un poco más pequeño. Pero si Vandalieu usara el mismo hechizo, se convertiría en una esfera con un diámetro de más de un metro.

Si un mago normal tenía una regla para medir su Mana en milímetros, la regla más pequeña de Vandalieu medía el Mana en metros.

Por supuesto, mostrar tal hechizo aquí haría que se destacara significativamente. Un miembro de alto rango del Gremio de Magos sería enviado ese mismo día para entregar una invitación para unirse al Gremio.

Vandalieu no quería que sucediera tal cosa, así que decidió usar un hechizo diferente.

«Examinador, ¿puedo usar cuchillos arrojadizos o piedras para esta prueba?» preguntó Vandalieu.

«¿Mmm? Esta es una prueba de magia, ¿sabes? dijo el examinador.

«Lo entiendo. Pero solo estoy pensando en golpear a mi objetivo con cuchillos y proyectiles lanzados usando ‘Telequinesis’”.

Si golpeara a su objetivo con proyectiles usando ‘Telequinesis’, un hechizo que movía objetos, el objetivo sería atravesado, pero al menos no volaría en pedazos.

El examinador hizo un ruido de descontento. “Un método tan indirecto… No, ya veo. Eso es todo. Muy bien, adelante e inténtalo”.

Parecía que había pensado erróneamente que Vandalieu tenía otras intenciones. Vandalieu se sintió aliviado de que su solicitud fuera atendida, pero tenía curiosidad por saber cuáles pensaba el examinador que podrían ser esas otras intenciones.

“Mano invisible, golpea mi objetivo”, dijo, recitando un encantamiento para ocultar el hecho de que poseía la habilidad “Revocación de canto”.

Agarró un cuchillo con su «Telequinesis» y lo clavó en el objetivo que estaba a diez metros de distancia. La ‘Telequinesis’ consumía más Mana cuanto más alejaba un objeto, por lo que este movimiento era más que suficiente, incluso con Vandalieu suprimiendo su Mana tanto como podía.

Si utilizaba la «Telequinesis» como lo hacía normalmente con su técnica de artillería, impulsando objetos que estaban cerca de él lejos de sí mismo, el cuchillo destruiría no sólo el objetivo, sino también la pared detrás de él.

“Mantener el gasto de Maná al mínimo al repeler el cuchillo mientras aún está cerca de ti y controlar el poder con el que el cuchillo golpea su objetivo mientras muestras tu habilidad de ‘Control de Mana’. Magnífico”, dijo el examinador.

Vandalieu había recibido involuntariamente los mayores elogios de todos los solicitantes, a pesar de que ni siquiera había intentado mostrar ninguna habilidad de control.

«No entiendo», suspiró.

Pero la prueba había terminado. Incluso si no estuviera satisfecho con el resultado, no podría rehacerlo.

“¡Va~n, ya terminé!” dijo Pauvina, regresando con una sonrisa de satisfacción en su rostro.

No había señales de ese otro chico. Sin embargo, por alguna razón, Pauvina sostenía la espada del niño.

«¿Cómo fue?» preguntó Vandalieu.

«¡Le gané a ese niño en todas las pruebas!» Dijo Pauvina alegremente. “Y luego, por alguna razón, dijo que me ofrece su espada. Sin embargo, se puso nervioso cuando la tomé”.

«… Estoy seguro de que quiso decir que te dedicará su espada en sentido figurado», dijo Vandalieu.

Parecía que el orgullo del niño no sólo había sido completamente roto, sino que había cedido ante Pauvina hasta tal punto que le ofreció su lealtad.

«En cualquier caso, vamos a devolver esa espada», dijo Vandalieu.

«Sí, de acuerdo. Y Van, resulta que después de todo me gustan más los palos que las espadas».

«Ahora que lo pienso, ¿cómo superaste el resultado de ese chico en una prueba de esgrima? Parecía bastante capaz».

Su habilidad de ‘Espadachín’ y ‘Técnica de Escudo’ eran probablemente de nivel 2 o 3. Pauvina no tenía la habilidad ‘Espadachín’ en absoluto. Pero la respuesta a la pregunta de Vandalieu era simple.

«Cogí la espada más grande de las que se usan para el examen, una de hoja plana. Cuando empecé a blandirla con una mano, el examinador me dijo: ‘¡Aprobaste!».

«… Ah. No tenía elección».

Era poco probable que los niños que se presentaban a la escuela utilizaran una espada a dos manos, pero había una disponible por si acaso, y parecía que Pauvina había empezado a blandirla ligeramente con una mano.

Aunque no tuviera técnica, no cabía duda de que el examinador había gritado «¡Aprobado!» sin pensárselo, temiendo que la fuerza de Pauvina le matara si se enfrentaban.

Vandalieu simpatizó de verdad con ese examinador. Por cierto, para la prueba de «Tiro con arco»… la prueba de ataques a distancia, Pauvina había obtenido al parecer una alta puntuación de la forma normal, utilizando «Técnica de lanzamiento».

«Ahora bien, ¿nos vamos a casa?», dijo Vandalieu. «Pasemos por el Gremio de Domadores de camino. Orlock-san está aparentemente de vuelta en su oficina».

«¡Sí! ¿Es el turno de Luves? ¿Podemos llevar a Rappie con nosotros?»

«Sólo lleva a Pain esta vez. Yo también llevaré sólo a Pete».

Y así, Pauvina aprobó el examen con una nota de primera, y la nota de Vandalieu fue igualmente satisfactoria.

Mientras los dos abandonaban el lugar del examen a paso tranquilo, el supervisor del examen, Dandolip… o, mejor dicho, Randolf, los observaba con expresión perpleja.

«¿Qué pretenden, sacando puntuaciones así?».

Vandalieu y Pauvina ocultaban claramente su verdadera habilidad. Incluso sin conocer las verdaderas profundidades de su poder, Randolf lo sabía. Y sin embargo…

«Incluso si trataban de ocultar su habilidad, ¿por qué lo hacían de una forma tan poco entusiasta? ¿Hay algún propósito detrás de ello, o fue el resultado de sus mejores esfuerzos por igualarse a los demás estudiantes?».

Randolf frunció el ceño, pero Vandalieu y Pauvina terminaron con éxito su examen sin tener que batir nuevos récords ni destruir el lugar del examen.

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El aprendizaje de esta Habilidad por parte de Pete fue involuntario. Pain también había aprendido la misma Habilidad, y cuando le preguntaron, respondió que para él también había sido involuntaria.

Sin embargo, su maestro… Vandalieu y Pauvina habían insistido en que era una habilidad útil. Habían dicho que, si trabajaban más en la Habilidad, tal vez podrían pasar tiempo con ellos en las ciudades humanas.

Y así, Pete y Pain habían hecho todo lo posible, y habían obtenido resultados. Y después de varios días de espera en uno de los «Mundos Interiores» de Vandalieu, por fin había llegado el día de mostrar esos resultados.

«Ya veo, así que esta vez habéis domado monstruos de tipo insecto», dijo Orlock.

Pete emitió un suave silbido y Pain chilló.

Orlock tenía una expresión sabia en sus ojos mientras echaba su mirada sobre Pete, que estaba envuelto alrededor de los brazos de Vandalieu, y Pain, que estaba sentado en la mano de Pauvina.

» ¡Maestro del gremio Orlock! Este es el mayor descubrimiento del siglo… ¡Un gran logro!», exclamó uno de los empleados del Gremio.

«Comparado con domar No Muertos… Sí, sigue siendo asombroso», dijo Orlock.

«¡¿Cómo estás tan tranquilo?! ¡Este es un momento histórico!»

«Quiero decir, estoy sorprendido, pero…»

El empleado del Gremio clamaba por esta noticia, pero Orlock mantuvo la calma.

«Mmm, sí. Entonces, ¿estás diciendo que domaste un Gran Ciempiés y una Mariposa Gigante que vivían en el jardín de esa mansión?». preguntó Orlock.

«Sí», dijeron simultáneamente Vandalieu y Pauvina.

Pero Pete y Pain ciertamente no parecían monstruos de Rango 1 para Orlock.

Comparando a Pete con un Gran Ciempiés, tenía cuernos; dientes afilados y de aspecto poderoso; y emitía chispas de electricidad de vez en cuando.

El dibujo de las alas de Pain simplemente parecía demasiado venenoso. Cuando había preguntado si estaba bien tocarlo, Pauvina había respondido: «Está conteniendo su veneno, así que creo que sí».

Pero sus tamaños eran iguales a los de los Grandes Ciempiés y las Mariposas Gigantes corrientes.

Pete emitió otro pequeño silbido.

Habían utilizado la Habilidad «Encogerse» para hacer sus cuerpos más pequeños. Pete era normalmente más grande que un Dragón, pero con esta Habilidad, podía envolverse alrededor de los brazos de Vandalieu y esconderse en sus mangas.

«Bueno, supongo que son variantes mutadas. Por lo que he visto, son capaces de comunicarse recíprocamente… Los reconoceré como tus familiares», dijo Orlock. «Puede que tengas visita del Gremio de Magos. Al menos escucha lo que tienen que decir».

«Lo haré», dijo Vandalieu. «Por cierto, ¿has dormido mal últimamente? Pareces un poco cansado».

Orlock soltó una débil carcajada, con una expresión sabia aún en sus ojos. «No te preocupes por mí, estaré bien. Después de todo, me tomé un descanso hasta ayer».

Vandalieu sacó una caja de madera del bolsillo del pecho. «Esta crema es una especialidad local del Ducado de Alcrem. Es eficaz para los problemas cutáneos causados por el estrés y la rigidez de hombros, así que pruébala».

Tal vez intuyendo el riesgo de que Orlock anunciara repentinamente su retirada, le entregó la caja, que contenía la crema V.

NombrePete
Rango13
RazaCiempiés de Acero Oscuro, Soberano del Rayo Rugiente
Nivel77
Habilidades Pasivas• Resistencia al hambre: Nivel 3
• Supermejora Personal: Seguimiento: Nivel 1 (¡Despierta de Mejora personal: Seguimiento)
• Secreción de veneno mortal (neurotoxina): Mandíbulas: Nivel 5 (¡Sube de nivel!)
• Inmunidad al atributo viento (¡Despertado de Resistencia al atributo viento!)
• Cuerpo superfortalecido: Exoesqueleto, Cuernos: Nivel 4 (¡SUBE DE NIVEL!)
• Fuerza monstruosa: Nivel 6 (¡SUBE DE NIVEL!)
• Mejora personal: Guía: Nivel 8 (¡SUBE DE NIVEL!)
• Curación rápida: Nivel 7 (¡SUBE DE NIVEL!)
• Valores de atributos reforzados: Depredador: Nivel 7 (¡SUBE DE NIVEL!)
• Visión nocturna
Habilidades Activas• Pasos silencioso: Nivel 1
• Carga feroz: Nivel 5 (¡SUBE DE NIVEL!)
• Trascender Límites: Nivel 4 (¡SUBE DE NIVEL!)
• Técnica de Armadura: Nivel 10 (¡SUBE DE NIVEL!)
• Rayo rugiente: Nivel 5 (¡SUBE DE NIVEL!)
• Coordinación: Nivel 8 (¡SUBE DE NIVEL!)
• Desplazamiento a alta velocidad: Nivel 2 (¡SUBE DE NIVEL!)
• Caída del Espíritu Familiar Demoníaco: Nivel 3 (¡SUBE DE NIVEL!)
• Encogerse: Nivel 5 (¡NUEVO!)
Habilidades Únicas• Devorador de Dragones Ancianos: Nivel 1 (¡Despierta de Devorador de dragones!)
• Bendición divina de Zanalpadna
• Protección divina de Vandalieu

Explicación de la habilidad:

Encogerse

Una variante de la habilidad «Alteración del tamaño» especializada en reducir el tamaño. Permite a la criatura que la utiliza encogerse hasta alcanzar el tamaño de su forma biológica más pequeña e inmadura.

Con esta Habilidad, una gallina puede tener el tamaño de un polluelo recién salido del cascarón y un perro el de un cachorro recién nacido. No invierte el envejecimiento; simplemente cambia el tamaño del cuerpo al mismo tamaño que la forma inmadura.

Así, algunos monstruos de tipo insecto, como los monstruos mariposa y polilla, pueden convertirse en mariposas y polillas del tamaño de orugas, pero no se convertirán realmente en orugas.

Mientras esta habilidad está activa, los valores de los atributos que no sean Vitalidad, Maná e Inteligencia disminuyen.



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Categorías: Death Mage

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